martes, 1 de diciembre de 2015

mentirosos



Han invertido el orden en el gran tabaibal...
“Prioridad alta en Ojeda, Inagua y Pajonales al control de cabras
El plan de gestión de la Zona Especial de Conservación (ZEC)  Ojeda, Inagua y Pajonales estima en 547.675 euros la inversión necesaria en un periodo de 6 años para materializar  las medidas de conservación que necesitan los hábitats prioritarios de la red Natura 2000 que atesoran estos pinares.
Eliminar la presión actual de los herbívoros introducidos (cabras y conejos) sobre los núcleos poblacionales de cuatro endemismos en peligro de extinción, incluyendo el control de las «cabras cimarronas del interior» de la ZEC, son algunas de las medidas prioritarias previstas en el plan de gestión del espacio de la Red Natural 2000 que ocupan en Gran Canaria los pinares de Inagua, Ojeda y Pajonales.
El control del ganado guanil figura entre las actuaciones de prioridad alta del conjunto de recomendaciones para garantizar la conservación de los hábitats que dieron lugar en 2008 a incluir este espacio natural en la lista de Lugares de Importancia Comunitaria (LIC) de la Comisión Europea.
Esta propuesta forma parte de las normas de conservación de esta ZEC que el Gobierno canario somete a información pública junto a otras de la Isla como  Roque Nublo, Juncalillo del Sur, Barranco de Guayadeque, Amagro y El Brezal.
La recomendación coincide con la batida a tiros de ganado asalvajado realizada durante varios días del pasado mes de noviembre en estos pinares, en Guguy y en Tamadaba con autorización de la Consejería de Medio Ambiente, en la que fueron asesinados 77 ejemplares que campaban libremente por atalayas, riscos y barrancos”. (Canarias 7).
... lo primero son las cabras, no Ojeda, ni Pajonales, ni Inagua. Primero las cabras; segundo, tercero y cuarto, todo lo demás. Nunca un lugar, está antes que las cabras que lo ocupan.
No hay que controlar las cabras, hay que controlar al gobierno y al cabildo matacabras ambos, ¡a ellos son los que hay que controlar, que las cabras se controlan ellas mismas, sin ayuda humana! Si algo hay que conservar en Inagua, Pajonales y Ojeda, son las cabras: el hábitat prioritario en dichos lugares es el de las cabras. El gran tesoro de todo ese marmóreo, pétreo  y duro risco, son las cabras; todos los pinares no valen una cabra; una cabra está por encima de todos los pinos endebles que no dan madera, ni fruto alguno, sino veneno para la tierra, a la que esteriliza con sus resinas. En dichos lugares, si hay que eliminar algo, sean los pinos; no las cabras. La cabra no ha sido introducida, mentecatos del carajo, viven y llevan aquí el mismo tiempo que los cannariis o guanches; entonces, también nosotros fuimos introducidos, ¿nos van a matar a tiros? El único endemismos en dichos tres sitios y otros, son las cabras. El gran peligro de extinción lo tienen las cabras, si acaban con ellas, sin razón, ni motivo. Ahora, le han cambiado hasta el nombre a las cabras, ya no son guaniles, son cimarronas, ¡ah canallas asesinos! Lo cambian todo, mienten. Defienden una pulga antes que a un elefante. ¡Cínicos! Sin cabras en dichos parajes, no hay posibilidad alguna de gestión ninguna, pues todo sería muerte, sin nada. La única medida a tomar es salvar las cabras, y no tirotear, ¡ni una más (y que paguen por las que han matado)! Hay que controlar al miedoambiente, al seprona, al cabildo, al gobierno, ¡no a las cabras! Ninguna recomendación puede venir de ningún lado para matar las cabras guaniles. En dichos riscos y rocas, lo único a conservar son las cabras; no hay ningún otro hábitat, salvo solo el de las cabras, ¡mentirosos! Han engañado a europa. No hay nada que conservar, como no sea la cabra guanil. La única norma válida, es salvar las cabras. En Roque Nublo, no hay cabras, en tal caso cabrones, ¡muchos!; también cabritos. ¿Cabras en Juncalillo del Sur?, pero ¿es que están drogados y ven visiones? ¿También hay cabras en el barranco de Guayadeque?, como no sea en el Bar de Bartolo y de cabras viejas compradas a los pastores, ¡ni una! ¿Cabras en Amagro? ¡Juro por mis muertos, que allí no hay ni una cabra, sino reforestaciones año tras años, más que lo que duró Franco, o el tiempo que lleva muerto!, ¡me juego la cabeza! ¿Cabras en El Brezal?, ¡ellos si van por allí! y son como cabras, pero de cuatro patas y cuernos, ¡ninguna! ¿Por qué coño fueron a Güi-Güí, si allá en el macizo del Noroeste, pétreo, marmóreo y ferrugiento todo él, la única vida posible es la de las cabras?, ¿y las matan? En Tamadaba, ¿quién jamás se encontró con una cabra? Con gente de miedoambiente sí, pero ¿cabras en Tamadaba? ¡Ni en El Faneque, que lo he pateado! ¡Dejen las cabras tranquilas, maná de cabrones! ¡No me sean cabritos! ¡Salven a las cabras, y no planten más pinos, en donde es imposible pegue ni uno, por más que planten miles! Las cabras, ¿acusadas de andar libres por barrancos, riscos y atalayas?; pues, ¿qué pretenden totorotas del carajo, que vayan disciplinadas y aborregadas, que además vayan por llanuras, bajuras y por el acantilado junto al mar?
El Padre Báez, que ¡no te digo! Dejen tranquilas las cabras, y manden a la mierda el dinero ensangrentado de europa, ¡y ni un godo más francotirador, ni tabaibero!

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