Guerra
a las tabaibas (2)...
“... rebaños de ovejas y toros... en toda
la tierra...” (salmo 8).
... que ha robado el terreno a los corderos; y de
ellos, la carne que no comemos; de las tabaibas tampoco nada. Las penurias son
absolutas. Las circunstancias comienzan
a ser dramáticas. Y nos ponen huertos en la ciudad -entre coches- y en los
patios de recreos de colegios de niños, al tiempo que el sepro y el miedo
persigue a los que los mantienen en su sitio: en el campo. Nos han encarcelado
a todos, solo andan con libertad, los políticos. Nuestras casas son ya “villas
miserias”. Tenebroso es el panorama. ¿Dónde anida la esperanza?