Forma
de salvar cabras en el Gran Tabaibal...
... precisamente ahora, es el tiempo (no les voy a
hablar del Adviento), de parir las cabras, o como decíamos de niños “¡están
de crías!”, y nada más hermoso que oír el balido del baifo recién
nacido, corríamos a ver de qué color y
cuántos habían nacidos (del mismo parto, ¡y nos los repartíamos!: “¡este
es mío!”), que es el caso que como ahora -digo- están de parto o paren,
es cosa de fácilmente, en lugar de dar tiempo para que los maten ahora por la Navidad
que se acerca, que usted, haga el mayor de los regalos a sus pequeños -si los
tiene- de ponerles un baifo en sus vidas.
Estoy seguro que lo querrán, y ésta saltará
en sus juegos con cabriolas muy graciosas, y fácilmente con un biberón primero
y ya después en cuanto empiece a mordisquear -si algo sobra-, es hierba, y si no,
las sobras de la comida en casa, es suficiente, para alimentar a la mascota,
que lógicamente irá creciendo y fielmente le seguirá a todas partes, y en lugar
de tener un perro que ya sabe lo único y más que le dan, la baifita será su mejor
compañía, su mejor mascota y en su momento le dará crías, y tendrá usted,
beletén primero, leche después, y hasta
queso, más estiércol para sus macetas o jardín, y de paso, contrarrestamos la
acción terrorista del cabildo matacabras y tabaibero, que en lugar de dar ideas
como ésta, y asegura usted tendremos cabras de por siempre, dado que siempre
las hemos tenido y sin ellas esto ya no sería igual, es por lo que les animo,
esto que dejo atrás escrito, no quede ahí y pase a la acción: entérese dónde un
pastor y cómprele una baifita, no la mate, críala y no se arrepentirá, me dará
mientras viva las gracias. Y no diga dónde ponerla que se le hace puesto en
cualquier sitio, y si hace lo que esa pareja de feligreses de Los Arenales
(Lomo Magullo [Telde]), que sale a pasear a sus pequeños, seguidos de las
baifas primero, machorra después y ahora las cabras, que cuales como perros -¡y
más fieles!- les siguen a todas partes a la par que se alimentan comiendo de la
hierba que cubren caminos y orillas de las carreteras. Pues dicho queda, y es
una forma y manera de suplir y sustituir las que ha matado el cabildo y de esta
forma y manera perpetuamos la especie. Todo será cuestión de sustituir perros
por cabras a no ser que el rebaño se le aumente tanto que necesite de un perro
para su cuidado, que de lo contrario, y salvo como guías de ciego, perros
policías y como terapia a algún enfermo, otra razón no tienen de existir, y sin
embargo el cabildo no emprende esa labor, y si lo hiciera, jamás y seguro,
nunca un servidor le llamaría “cabildomataperros”.
El Padre Báez, que nuevamente les sugiera una forma de
mantener la cabaña caprina o cáprica, por encima de todo, y sea como sea.
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Y, ¿a quién le amarga un dulce?, que “aunque
no lo soy, me gusta oírlo” (esto decía Don Manuel Rivero, Pbro., cuando
un servidor le decía: “¡usted, es un santo!”):
¡Qué alegría Padre Báez, saber que ésta sí es su cuenta de Facebook! ¡Qué
buena la información sobre el trato que los guanches tenían con el mar! Ya
sabía yo que usted me iba a aclarar mis dudas sobre el tema. Es una
"Enciclopedia Guanche" andante. Muchas gracias. Lástima que no enseñen
nada sobre lo nuestro en las escuelas, ni haya más medios a nuestro alcance
para aprender. Pero hay que seguir en la lucha para cambiar la situación y
conseguir que haya una asignatura guanche en las escuelas y universidades
canarias. Un saludo Padre Báez, y de nuevo gracias por aclararme la duda.
Espero que le vaya muy bien por allá arriba en Lomo Magullo. Mis padres le
mandan también un saludo y un fuerte abrazo. En mi casa le seguimos ya sea por
televisión, radio o internet; y ¡se le echa mucho de menos!
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