este pobre...

¡Este pobre tiene, cerebro de gallina!...

... es lo que se dice de alguien con pocas luces, y una vez más el recurrir al gallinero, y esta vez no para recoger o coger huevos, sino para comparar a alguien que no discurre, que se parece a las citadas y pobres gallinas.

Y, si bien hay muchos casos que poner como ejemplo, me viene a la cabeza justo ahora, lo que pretende el cabildo: llenar de pinos, y ello hasta con 350.000  ejemplares la riqueza de ese valle, barranco y lomas, laderas y explanadas de Veneguera; señal más que clara, que no tiene más luces que las de una pobre gallina, ya que en lugar de donde las mejores frutas, como son los mejores: mangos, los mejores aguacates, los mejores papayos, las mejores naranjas, etc., digo, en lugar de plantar lo propio, lo van a llenar todo de pinos, con algunas sabinas, dragos y viñátigos (basura al fin), ¡es para molerlos a palos!, y sobre todo para nuevamente SALVAR VENEGUERA, de la mano de estos más que depredadores, maléficos del cabildo que todo lo que tocan se lo cargan, y ese vergel que es el lugar, en otro tiempo tierra de tomates y plátanos, ahora lo van a esterilizar y destruir con plantas que son veneno y basura, y pensar que a tal fin, antes se ocuparon de matar las cabras, para precisamente esto; ¡de pena! Ya la cosa es de acción popular, para impedirlo.

El Padre Báez, que compara hoy la luz del cabildo a la de las gallinas, unos pobres animales que no razonan, sino que se mueven por instinto, por hambre; así es el cabildo, pues las cabras razonan más y mejor que ellos. Pues lo dicho: estos pobres del cabildo, tienen cerebro de gallinas. Y es que no es normal, ni de recibo, se carguen y destruyan las mejores tierras de la isla, para esterilizarlas, envenenarlas, maldecirlas, sin que de esas plantaciones se sigan bien o producto alguno, sino perjuicio y daño.

Por pundonor y dignidad, por economía e identidad, este pueblo, debe salir en masa a la calle a protestar. No es de recibo, este pueblo permita al cabildo cometer tamaña gamberrada. No debemos permitir se plante un solo pino más, que la pinocha no se come y no soluciona nada, encima aleja lo termófilo, humedad, lluvia o agua. Justo donde antes habían remanentes y fuentes por todas partes, ahora todo eso ha desaparecido de Tamadaba, Artenara, y allá donde quiera se plante un pino, y así vamos de secos a peor, a desertizar la isla a secarnos como pejines al sol, sin agua sino sacada del mar, la misma que esteriliza la tierra, mientras que castañeros, nogales, ciruelos, olivos, etc., atraen el agua, según experiencia y refranero. Por tanto: ¡no al cabildo!, y... ¡SALVEMOS VENEGUERA OTRA VEZ!

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A Javier Ravelo, soy yo (un servidor), quien le da las gracias por su colaboración e incorporación al Programa; sin él, todo sería diferente. ¡Gracias guanchito (Beneharo)!

 

Gracias Padre Báez por permitirme compartir con usted el proyecto y el compromiso que tiene con esta tierra. Hoy finaliza la temporada pero estoy seguro que será la primera de otras tantas. En septiembre volvemos a tope!

 

Enviado desde mi smartphone Samsung Galaxy.

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“... son falsos, tramposos, disfrazados... nos esclavizan, nos explotan... se llevan lo nuestro... arrogantes, insultan... ¡qué vergüenza!... bandoleros...” (2 Cor 11, 7-29). / “... me ceñí de valor para la lucha...” (salmo 17). / “... se aliaron, para atacar juntos...” (salmo 47). / “... mi alma se consume... reprendo a los soberbios... los maldigo...” (salmo 118). / “... no quede yo defraudado, no triunfen, no quede defraudado...” (salmo 24).