sábado, 17 de septiembre de 2011

POPURRÍ X:


Se equivocan al pedir salud y trabajo.
Disculpen lo repita, pero como no dejan de decirlo, a ver si se enteran de una vez, y como todo el laico santo año, nos lo pasamos de romería (ronería) y Fiestas, con visitas a santuarios, Iglesias, ermitas, basílicas, etc., que nos tienen mareados, con que los que van hasta esos lugres van a pedir al santo, santa, Virgen o Cristo, todos lo mismo: salud y trabajo. Y digo no y mil veces no. No culpabilicemos a la corte celestial como los responsables y no dadores de la salud y el trabajo, que la primera pertenece a cada uno (y en todo caso a la Sanidad), y el segundo, es cosa de los gobernantes y políticos. Precisamente al respecto, el campo, lo tienen cerrado a cal y canto, con Medio Ambiente de guardián, para que no se toque nada. El día que el campo se abra, faltan trabajadores.

Como no tienen trabajo, pues ¡a estudiar!
Y, por lo anterior, y como consecuencia, al no tener trabajo, o se dedican a la bartola, a la droga, a tragar tele, a la calle, a no hacer nada, a delinquir, en cómo quitarse la vida –unos pocos a rezar-, etc., pues que no faltan, y son muchos -los que quitando las plazas a los nuevos, al retenerlas ellos y coparlas, per sécula seculorum, llenan las aulas, a pesar de ser hasta abuelos algunos de ellos, pues que a falta de trabajo y como fórmula de emplear el tiempo, le dan por los estudios (estudios, que después no les sirven para nada, pero mientras, están entretenidos [¡y encima no cuentan como parados!]).

Cada día nos sorprenden con lo que comían...
Parece que la clase científica, cada día nos sorprenden con lo que comían los primitivos, datándonos el tiempo con precisión de millones de años, y se sorprenden y nos sorprenden diciéndonos y revelándonos la sorpresa, de lo que comían, según latitudes, siglos, etapas, etc. Y claro, uno que hablando de comida, piensa en los del “cuerno de África”, piensa y dice: ¿que qué comían los de siglos ha?, pues sencillamente: ¡lo que trincaban!, ¡no te digo (¡vaya ciencia investigadora, mejor nos dijeran qué pueden comer los que pasan hambre al presente, pero... miran al pasado!), y con eso, nos saciamos o hartamos!

La diferencia: un alcalde...
Cada día y varias veces cada día, y siempre, siempre que se les interroga, entrevista o tienen la oportunidad, el señor alcalde actual critica al anterior, y el anterior al actual, pero esto siempre fijo, fijo (y lo mismos en otros estamentos), menos en uno: jamás oí, que un cura o un Obispo, criticara a su predecesor. Pues, ¡tomen buena nota, y vean la calaña de cada uno! Lo diferentes que somos. Y resulta -en nuestro caso- que los que no criticamos, somos los más criticados. Dicho queda.

Lo que subyace tras las siete estrellas verdes...
Entiendo, que utilizar la bandera de las siete estrellas verdes, tiene su significado: un símbolo con connotación independentista (pues viene de ahí, sabemos quién es su padre o ideólogo); si se convirtiera en la bandera oficial, esa carga histórica no hay quien se la pueda quitar, pues subyace; ello sería la mejor reivindicación pro independencia del Tabaibal, y volveríamos ser Canarias (espero el nacionalismo canario, sea consciente, aunque por estrategia lo silencie, de todo esto); ningún canario (tabaibero), debiera tener otro símbolo de su tierra, que no sea éste. Ojalá, que además de ser la bandera propia de los independentistas, y de la CC, pronto sea la de todos los que vivimos y somos de estas islas. Amén (que quiere decir, así sea). Y todo aquel, que le molesta o no la acepta, “¡que coja la maleta!”

También ganamos por goleada...
... como en casi todo lo malo, en familias enteras, con todos sus miembros y miembras en paro. ¡Vaya orgullo y satisfacción! Un nuevo record nacional; una vergüenza para la clase política y gobernante, que teniendo tierras abandonadas, no las podamos tocar, por miedo a quien sabemos, nos pueden arruinar, solo por el intento. Los más, en esto, ¡sí señor! Todos en la familia, sin empleo, es decir son “parados”. Pongamos que hablo de casi un 20 % de las familias, con este cáncer o drama trágico y esperpéntico: que se levanten de dormir, y nadie coja el material o herramienta de trabajo, sino seguir encerraditos en casa... Pero, lo grave con ser lo dicho,  viene lo peor: la cosa va a ir a más. Y, ahora, en cuanto los turistas, comiencen a reconducirse a su África querida y del alma...

Si el despilfarro público...
... público, como proponen la defensora del pueblo de la comunidad de Madrid -una tal María Luisa Cava de Llano-, anunció en el congreso, que lo solicitó al ministerio de justicia, que se llegue a aprobar, como delito en el código penal el despilfarro público. Si se aprobara, estoy seguro que Gesplán, no vuelve a ver más la luz fuera de la cárcel, porque en ello, ¿quién les puede ganar (y con ellos, el gobierno autónomo que los encubre y protege). Pues, esperemos sea aprobado, para que éste y otros desmanes, sean parados. ¡Pido al Altísimo por ello, que sople el Espíritu Santo, sobre los que de Dios, toman ejemplo de Justicia (o deben tomarlo)!

Alguien (un amigo), me dice (telefónicamente), que:
“¡Padre Báez, por favor, diga algo sobre la carretera que va a Tamadaba, ese lugar emblemático, y que visitado por turistas y nosotros, tienen y tenemos que pasar por una carretera echa gofio!”; a lo que contesto: “¡sobre eso ya tengo algo escrito, pues hace una quincena, estuve en el Faneque, y pude comprobarlo y sufrirlo!”. Es torturante, es un rompecoches, es un sin sentido (se tire tanto dinero en lo que nadie pide, ni hace falta, y en esto que clama al cielo, a peor el remedio que la enfermedad: es decir: no hacen nada.

La PAC (Plantación de Árboles Carroñeros)
¡Perdón, me volví a equivocar: se trata de la Política Agraria Comunitaria o Común! La misma, que en 1992 siguiendo el modelo tradicional de los años 60, se dedicaron a producir más, y a proteger lo producido, comprando todo y cuidarse de las importaciones, con lo que consiguieron cuantiosos excedentes, que trajeron la disminución de los precios y comenzaron con las ayudas, y siguieron con la retirada de tierras que se dejaban de cultivar, para dedicarlas a lo forestal, ocio, medioambiente, etc (seguiré en esto, que da mucho de sí).

El Padre Báez, que se tiene. que contener, para no seguir. Es mucho lo que hay que contar, pero hay que dosificar, para no atragantar a nadie.

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