jueves, 19 de febrero de 2015

silencio

Silencio tabaibero…
“... un árbol plantado... da fruto en su sazón...· (del salmo 1).
“... y toda clase de trabajos del campo...” (del libro del Éxodo 1, 1-22).
“... el uso menguado de los alimentos... ayunando...” (de los sermones de san León Magno, papa).
“... mi aliento desfallece... recuerdo los tiempos antiguos... tierra reseca...” (del salmo 142).
“... hierba en los montes... que da alimento al ganado...” (del salmo 146).
“... comerás del fruto de tu trabajo...” (del salmo 127).
“... metieron el arado y alargaron los surcos... hierba... que se seca y nadie la siega; que no llena la mano del segador ni la brazada del que agavilla...” (del salmo 128).

… el que ha callado a todo medio de comunicación sobre las tabaibas. Nadie dice ni pío al respecto. Creo que sancionan al que se atreva a decir algo sobre el tema y que la censura ha vuelto. Todos cierran la boca sobre el tema como si tal cosa no existiera.
Cierto, que la libertad de prensa no existe en la isla (e islas). Aquí no se transmite al populacho sino circo (carnaval y fútbol), para que no piensen cuales masas borreguiles. El único lenguaje de la administración es la multa. Cierran la boca a todos, con dineros y publicidad. Los medios no sirven al pueblo, sino a ideologías corruptas que los callan y desvían. Precintan la verdad, y dan libertad a la idiotización del pueblo, comiéndoles el tarro, y dejándolos majaretas, defendiendo colores de equipos de fútbol de fuera y peleándose por premios de disfraces carnavaleros, cual si en ello se nos fuera la vida. Ciegos, para no ver otras cosas, sino las que les enseñan, según intereses de la clase poderosa y mandadora. Solo intentan callar todo aquello que les descubran sus chanchullos y tropelías, corruptelas y atropellos. En todo esto, el papel que juegan las tabaibas es sumamente importante, por eso las silencian, como si no existieran y las tenemos hasta en las sopas, es un decir. De ahí, que nadie persiga a las tabaibas. Recuperar el territorio para la ganadería y la agricultura va a ser imposible mientras los voceros del periodismo ya sea de cualquier modelo, sigan callando cómplices esta situación, la misma que no denuncian porque en ello les va la comida, por eso no alzan sus voces de estómagos agradecidos aunque sean llenos de basuras traídas desde el fin del mundo, que aquí solo producimos tabaibas. Difícil con este panorama recuperar la tierra para el sector primario. Ante tamaño atropello, solo cabe el campesino recupere el poder, y entonces tendríamos recursos de sobra, trabajo, comida y libertad. Por lo pronto, estamos dominados por una clase opresora, burguesa y ladrona que nos roba la libertad y la comida. Y lo malo, que quieren perpetuarse en el poder, dominando desde la corrupción y el atropello, ante los que la masa obrera y borreguil calla dominada y con miedo.
El Padre Báez.
Amén, sin más:
Muy bien, me alegra que intervenga de nuevo en nuestro programa con su conocimiento y verbo encendido por esta causa justa del campo.
Sí, César Manrique era un artista y ud un historiador y cronista; pero, me parece Padre, que en último término el objetivo que nos une es el mismo: evitar que los políticos, especuladores y otros "bichos" y hierbas malignas acaben de manera irreversible con el patrimonio cultural, natural y campesino. Como cristianos tenemos, creo yo, un deber inter-generacional por el que el mismo Creador nos pedirá cuentas: dejar a la siguiente generación el hábitat si no mejor, al menos como lo encontramos.
Un fraternal abrazo.

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