miércoles, 8 de febrero de 2012

POPURRÍ 139:


Sobre mi tesis (139):
“... el día 1 de Julio de 1581, Diego de Porres Sagredo, hace escritura de donación a favor de la Compañía y muestra su deseo de ayudar a la casa y colegio de San Pablo en la Ciudad de los Reyes (1). Acepta la fundación el Padre Baltasar Piñas, Provincial, que lo era desde el 25 de Mayo de 1581 (2).
Con fecha 24 de Julio de 1581, el Virrey Martín Enríquez de Almansa, da licencia para que los religiosos de la Compañía puedan leer a todas horas: Gramática, Retórica, Griego, Lengua de indios y demás, Teología y Arte, en el colegio de la Ciudad de los Reyes; no permitiendo que nadie moleste a sus estudiantes, “pues todos se crían para servir a este Reino y aumentar las escuelas, especialmente en lo que toca a Theología” (3).

Rehabilitar caminos rurales...
... un servidor, rehabilitaría cercados, cadenas, tierras y fincas abandonadas para sembrar y plantar (pinos y cardones, ¡no!), pero andar arreglando caminos, sin que sean entradas a lo dicho, me parece es tirar el dinero, a no ser que de cara al senderismo o por razones históricas, se hagan, pero sin meterles empedrados, ni hacerles escalones, que fastidian más que ayuda. Y si se trata de limpiarlos de maleza, para que se pueda caminar por ellos sin más, está bien, pero si no, mejor no “meneallo”, que se decía en castellano antiguo, y se entiende.

Huertas urbanas...
... no deja de ser extraño, no se fomente la agricultura en su medio y ámbito propio, y que lo hagan entre la contaminación de humos de coches, gases de casas, mierda de perros, etc., etc., A no ser, se trate de pobre y buena gente, que  dejado el campo, por la familia y circunstancias de todos conocidos -el miedo y ya saben a quién- nostálgico de ese ayer, seguro con el que sueñan cada noche y suspiran cada día, lo remedien, haciendo esos disparates, porque lo que de ahí surja, va a ser puro veneno. Por eso, déjenlos volver al campo, sin trabas, para que surja de nuevo, lo que nunca debió haber desaparecido.

Toda vez, que el pan viene de fuera...
... nuestras panaderías, no corren con suerte, y ello a pesar del paro, hambre y crisis, porque más de cuatro, solo comen bocadillos o pan con algo; pues a pesar de ello, con esos panes que ya nos traen de fuera, y que aquí basta con pasarlos por el horno, han arruinado -como pasa con la ganadería y agricultura-, ahora también a los panaderos. Pues, éstas tenemos. A lo de fuera se protege y ayuda, y a los de dentro ¡que los parta un rayo!, y suban los parados. Gracias al Gobierno doble (autonómico y cabildicio), o triple (los de antes, y el de espakistania), o cuádruple (los dichos, más europa), o quíntuple (los ya redichos, y el de los ajuntas), que tenemos. Total, que entre todos, nos van a matar a hambre. Y el pan, el pan..., ¡también nos lo traen! ¡Ah macacos, enemigos del tabaibal!

El cabildo quiere vender el tabaibal...
... ¡sí señor! Nos venden; primero lo compran todo (en Artenara, ya solo un 7 % es del municipio; el resto es del cabildo. Ahora el cabildoplantapinosquetenemos, quiere que todo el mundo venga al tabaibal (exactamente al gran tabaibal), y cual prostituta que se exhibe, llevan estampas o tarjetas, fotos e imágenes, carteles y vídeos, de nuestras bellezas, para decirles que como no tenemos agricultura, ni ganadería, ni panadería, que vengan a dejarnos algunas limosnas, con las que poder comer..., ¡de pena usted, de pena!

Primero lloraron porque...
… imágenes nuestras salían en la promoción de nuestros hermanos de tenerife, fuera de aquí; ahora enseñamos la cumbre del gran tabaibal, con imágenes del Teide, cual si estuviera en esta isla; y aquí y ahora, y no pasa nada, ni nadie dice nada, ni allí ni aquí. Son como niños.


Notas:
(1).- M. P. III. Doc. 2.

(2).- M. P. III. Doc. 3.

(3).- M: P. III. Doc. 4.

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