Me imagino, no me van a hacer caso, pero no importa (llevo más de treinta años diciendo por pasiva y activa, que no planten pinos, sino higueras, castaños, nogales, etc., y ningún caso me han hecho; al contrario, parece lo hacen con más rabia. Últimamente, en la Presa de las Niñas, debajo de los pinos, han plantados más pinos [y eso, que debajo de los pinos, no crecen ni los pinos]), pero, vayamos a lo que iba:
Que diciendo que llegan tantos turistas a Gran Canaria, ¿por qué de una vez, no ponen “la guagua arqueológica”? Esta, los llevaría a los distintos yacimientos, con lo que se volverían a sus países, con un recuerdo imborrable. Por supuesto, no pienso en museos, ni en Parques estropeados al restaurarlos con hierros, sino que los lleven a los que se conservan en estado puro. Y así, se llevarán algo más que el sol en la piel, y el paso por la playa; descubrirán nuestras raíces (es decir: nuestra cultura).
Por descontado, que los turistas cultos, comenzarán a venir en gran número, y nuestra economía, resurgirá, al tiempo que se crean nuevos puestos de trabajo. Pero, sobretodo, descubrirán nuestra arquitectura, nuestra cultura, nuestra historia.
Tendríamos más vuelos, más hoteles llenos, y sobretodo, tanto arqueólogo escondido y callado, pudieran hacer de cicerone, y enseñar a los millones de visitantes -que sin dudar vendrán, tan pronto se enteren, tenemos algo único y exclusivo: la cultura guanche, de donde venimos y somos-. Tenemos que llevar a los turistas, a nuestra historia, a nuestra cultura.
Ya pudiéramos de paso, venderles vídeos y libros, que comprarían muy gustosos, para ampliar sobre lo nuestro (un mismo servidor, tiene vídeos de los yacimientos en número que pasan del centenar que en su día pasaron por la Televisión y son una fuente de información excepcional, y decenas de libros sobre la temática guanche), pero no se venda nada mío, sino de los que quieran (menos la Guía que les dice dónde está todo, porque pueden desaparecer cosas, como el lagarto de los letreros de Balos y otros).
Ya va siendo hora, veamos las guaguas arqueológicas, llevado a los turistas a nuestro pasado; el viaje o excursión más apasionante. Lo cual no quita, para que de vuelta, se les lleve a alguna playa, y a comer y descansar.
En esta misma línea, sugiero que para los amigos del senderismo, también hayan quiénes los guíen y lleven por los yacimientos (a veces, pasan al lado de los mismos, y ni se enteran [faltan señales, paneles, indicaciones, etc., -tal vez sea hasta bueno, no sea que los dañen o estropeen, pero si van guiados, los respetarán-]).
Pocos turistas, saben de nuestro origen, de nuestras gestas, de nuestra cultura ancestral y milenaria. Por otra parte, no hay lugar en el mundo, que no tenga este sector cubierto, de una u otra forma, sacándole -además- buenas compensaciones económicas, y países hay que viven de ello.
Es tan rica y especial nuestra cultura, que de mostrarla, los turistas verían cosas, que en ningún lugar del mundo, pueden ver igual, por ser lo nuestro algo tan propio y distinto, que no hay nada igual, ni parecido (y no pongo ejemplos, porque no hace falta).
El Padre Báez, que no deja de dar ideas, para que si son humildes las acepten, que ello redundará en bien de los que vienen a visitarnos, y en nosotros mismos, por lo que ello generará. Pues dicho queda. Ojalá acepten esta sugerencia o idea, y la lleven a cabo.
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