olivo

Si cada tabaiba fuera un olivo…

“…. árboles frutales... y animales domésticos... jóvenes y también... los viejos...” (del salmo 148

… tendríamos aceite para exportar al mundo entero y sobraría aceite; y tanto el olivo no necesita riego, ni otro cuidado sino el sol y el buen clima como lo vemos en Temisas y por otros lugares, sería una fuente de trabajo el recolectar las aceitunas, llevarlas a la almazara, repartir el aceite, etc., etc. Y conste sale barato o gratis la reforestación -salvo el trabajo de plantarlos- ya que ésta es tan fácil como coger un gajo de olivo, trocearlo, ponerlo en la tierra y, ¡ya está! Es operación, que se puede hacer todo el año, y de diez pegan siempre una media de nueve. Así que a ver si al cabildo le da por el Olivar en lugar del Tabaibal, y salimos ganando, porque aceite como la nuestra no hay en ningún sitio, y toda vez el olivo se ha adaptado a nuestro clima y tierra, que es algo ya propio y exclusivo aunque traído de fuera. Incluso en los terrenos más ásperos y duros el olivo pega y da su fruto, pues no es planta de riego, ni de poda -no sea como los de la granja de conejos en Temisas, que capitalinos ellos, los podaron quitándoles todas las ramas que colgaban y se los cargaron, pues el olivo echa el fruto, precisamente en las ramas que cuelgan-; y es que es cosa de la que entiendo y por eso hablo de ello: ya que poseo una terrera frente al patio-jardín (antes), ahora convertido en huerta, donde pasa de un centenar los olivos, más en las 17 terrazas cuatro en cada una de ellas, y de por medio la carretera, al otro lado las tabaibas protegidas, y mis olivos en flor, dando ya el fruto de la paz. En fin, que no vine -como el otro- a hablar de mi libro, sino de las tabaibas, que sustituidas por olivos, nos devolvería el trabajo perdido o empleo, a la par que la riqueza del oro líquido que es el aceite, y ninguno como el nuestro -como queda dicho más arriba- por su calidad única en el mundo, por nuestro sol y nuestra tierra. Mira que piensa uno en los que vio en extrema-dura y en anda-Lucía, y dice, olivares como los nuestros, no hay que se les comparen, y mientras el cabildo protegiendo tabaibas que dan leche. Les cuento: le pedí a un  feligrés de Cazadores me plantara de su olivo unos trozos de palos y me dijo, había mantenido una manguera con horcones (jorcones) de olivos, y he aquí, que le echaron raíz, retoñaron y sin querer se ha hecho con tres nuevos olivos, así de fácil, pues pegan hasta sin querer. Y el cabildo, trayéndolos de p´afuera, pudiendo hacerse con los de aquí (un servidor tiene un semillero de ellos incontables en su número). Pues, dicho queda, por si se animan: cambien tabaibas por olivos, y salimos ganando con creces, pues las tabaibas solo nos dan pérdidas  y amarguras (la leche, las multas, la exclusiva, etc.).

El Padre Báez.

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Por si quieren echarle un vistazo:

Mi muy estimado Padre Báez:

Su programa ya lo hemos publicado y puede acceder a él con este enlace:

http://www.ivoox.com/terror-campo-polinomia-5-11-2014-audios-mp3_rf_3702243_1.html




Católicos como usted Padre, son los que necesita la Iglesia.



Un abrazo:

P. C.