jueves, 12 de abril de 2012

Me han convencido:


Fue anoche –día 11, del 3 del 12- y fue con la mirada puesta en el 2014, en el Teatro Juan Ramón Jiménez, la presentación o primer paso, de cara a conseguir Telde sea la sede o centro de la educación inclusiva. Y de ello, hubo varios ejemplos, y todos más que convincentes. De cierto, hay madera, y depende ahora de la suerte, y de los pasos siguientes.


Se habla de un viaje, y cierto, el logo son dos barcos de papel, que simboliza esa navegación, que espero llegue a buen puerto, y no naufrague. El acto contó con numerosísima asistencia; sobresaliendo la especie política, cargos, dignidades, etc., y de otras áreas, pero todas en primera fila, según protocolo, el mismo que relegó a la Santa Madre Iglesia entre el vulgo, damas, y a la cola, mientras otros lucían sus sonrisas al escenario, donde...

El Cuarteto de la banda de música del ayuntamiento puso la obertura o ambientación, arrancando los mejores aplausos. No faltó quien se puso a distinguir entre “todas” y “todos”, repetido hasta cuatro veces, que hace daño a los oídos, y si eso es educación inclusiva, pues puede que pase, pero si no, nos quedamos con “niños” y “niñas”, en lugar de “niños” a secas como lo anterior (“todos”), “todo” sin más. Y ello, en voz de directora de Escuela Infantil, que nos da esa lección de desconocer el neutro o el masculino que implica a lo femenino, pero... (¡mal empezamos!).

La intención es, llegar a Corea, y el vídeo de nuestro buen hacer si exceptuamos lo dicho en el párrafo de arriba, supimos de quien creía ser Pablo Rodríguez de CC y era otro de Educación, que nos definió distintos términos. Emotiva fue la actuación del Centro Ocupacional, que supuso mayor aplauso que para el de la música. Luego, se siguió con más vídeo (un tanto reiterativo y repetitivo, pero bueno al fin y al cabo).

Y, para un servidor, la sorpresa de la noche fue, “El Patio”, colectivo de Las Remudas, que desde hace 10 años, viene haciendo una labor de integración, cultura, participación..., ¡envidiable! Desde aquí mi enhorabuena (el mismo que pondría –repitiendo actuación- el broche final).

Se extendió la concejal de educación en su intervención, por ser un poco o mucho la madre de la criatura. Y lo de nuestra alcaldesa, con su eterna y contagiosa sonrisa, que llena el escenario, con su naturalidad y encanto.

Espero y deseo, que este sueño, de convertirnos en el centro mundial, llegue a conseguirse; creo, que al margen de lo allí expuesto, por ser primera sede episcopal, por ser el guanartemato del sur, por tener tanta Historia y cultura, por tantos y tantos motivos (incluidos los allí expuestos en resumen [la velada sobrepasó las dos horas, pero que resultó como si hubiera sido media hora]).

Me resta solo felicitar a todos, menos al protocolo, que ignora un sacerdote merece otro puesto, aunque según Jesucristo, si estamos en la cola, ese es nuestro puesto de mayor prestigio (aunque como aquel que fue a la boda y se puso el último esperó le dijeran tu puesto está aquí, pasa; pues datos como este, quitan puntos de cara a la candidatura, que si de educación va la cosa, lo dicho deja mucho que desear). Y conste, no lo digo en cuanto a mi persona, sino a lo que soy (que es muy otra cosa: un sacerdote).

El Padre Báez.

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