miércoles, 6 de abril de 2011

¡MENTIROSOS!

   


 
 
    Han tenido cuatro años últimamente, y con anterioridad, de forma continuada, desde hace ya más de medio siglo, dando palos a la agricultura y a la ganadería, hasta el punto de llegar a desaparecerla, de no ser por los cuatro que se resisten a abandonarla, y a los que persiguen cual si fueran delincuentes, y vienen ahora en vísperas de las elecciones, con las promesas y mentiras de rigor y de siempre, que si van a estimular, favorecer y potenciar el “sector primario”, sin especificar qué medidas van a tomar o qué leyes y normas van a derogar!
 
    Prácticamente, ha desaparecido la agricultura y la ganadería y la que queda es testimonial, con la pasividad de ellos, los que mal nos gobiernan, porque les es –para ellos- más rentable traerla del fin del mundo, aunque sea la peor y nos maten, además de arruinarnos, y ahora, ahora nos dicen que la van a favorecer, pero ¿de qué forma y manera? Solo con palabras bonitas que se las lleva el viento y después de mayo, si te vi no me acuerdo y “¿eso dije?”, “¡qué va!”, “¡Vamos a seguir dándoles palos hasta desaparecerla del todo!”, “¿o no lo ven, que es cosa progresiva y que va a más?”
 
    Que sí, las presas están rebosando, pero no para la agricultura, que ya tienen planes; y no precisamente, para regar los campos, sino para sus proyectos. De modo y manera que son los que la han destrozado, y dicen -¡a buena hora y con sol!-, hacernos creer van a ayudar al campesinado. Pero, ¿se creen nos chupamos los dedos? Nada han hecho, salvo enterrarla, y ¿la van a resucitar? No son creíbles, nos engañan, y mienten como bellacos, a ver si así arrebañan algún voto más, con promesas que no van a cumplir; pues si de aquí hacia atrás, nada han hecho, ahora que unos se van y otros entran, éstos harán lo mismo: la agricultura y la ganadería, mientras tengan las normas y leyes que tienen, no se va a poder dar un paso al frente; hacia atrás todos, hasta que esto desaparezca, o un  boyero o patatero llegue al poder.
 
    Todo lo que han hecho –y van a seguir haciendo- es poner obstáculos mil, y dificultar por todos los medios el campo vuelva a ser lo que fue, porque de entrada, lo tienen todo protegido, y así, no hay quien pueda dar un timbalazo, sino a riesgo de las multas y cárcel. Todo lo que han hecho es quitar las tierras al agricultor y pastor, para plantarles en ellas pinos y retamas, y han permitido la isla se llene de tabaibas por todas partes.
 
    Ejércitos por (mar), aire y tierra, vigilan al hombre del campo por si tiene un cantero de papas, o lleva tres cabras a pastar, cual si fuera un terrorista a abatir y a exterminar, con visitas, amenazas, avisos, multas, etc. Lo que comemos viene todo de fuera, aunque te dicen es fruta y hortalizas de aquí, ¿dónde las cultivan para ir a verlas? Y el queso, también todo es de Guía, y de flor; ¡flor de caminos...!; y ahora, que todo el campo es un pinar, ¿qué ayuda van a hacer a la agricultura y a la ganadería?, ¿acaso van a arrancar los pinos y devolverlos al pastoreo y a plantar coles?; ¡eso, que lo traigan todo de  Marruecos, hombre, lo cultivan con mano explotada y esclava y cuesta menos!, ¡no te digo! 
    
    Un par de ejemplos les convencerán no van a dar ninguna ayuda, al contrario: de hecho, si a Ud., se le muere una vaca, enterrarla no puede; y el funeral que le hacen ellos, con coche fúnebre y cremación, le sale a Ud. -¡pobre vaquerizo!-, el deshacerse de su animal muerto lo que éste no le dio en vida en leche y estiércol, porque le pasan la factura y es de infarto; ahora, sin vaca y encima pagando el entierro del animalito, ¿es eso ayuda? Pero les pongo otro –y hay miles-: Ud., no puede ni matar un baifo para comérselo, porque basta que alguien lo denuncie, para que Ud., se busque la ruina; ¡en mala hora, Ud., mató un animal, sin tener en cuenta la normativa y otras leyes!
 
    Total, que si algo hay difícil hoy, por no decir casi imposible, es dedicarse al ganado o a la labranza, que es como se dice en el campo (¡ellos lo llaman “sector primario”!, ¡cógelo cuco!); nada les digo del sacrificio que supone estas tareas o menesteres; los sabe quien los ha vivido; seguir en la brecha ya es cabezonería y ruina, todo te deja pérdida, al margen de los obstáculos que te ponen; por eso, el abandono ya es casi masivo, y solo queda un resto o residuo. Tenemos pues, la profesión más antigua (nació con el hombre), en gravísimo estado de desaparición total, y vienen ahora los mentirosos de turno a decirnos: “¡la van a potenciar!” Claro, no dicen que van a potenciar su desaparición total, y en esos terrenos abandonados, ¡seguro: plantarán más pinos!
 
    El Padre Báez, que sabe y le dice a sus amigos, que éstos no van a mover un dedo, sino para seguir perjudicando a la agricultura y a la ganadería, y si no, como decía mi abuela: “¡al medir, contaremos!”
   
 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario