Con
el matacabrasdelmiedoambinte cabildicio y tabaibero...
... ¿acaso no es para cabrearse, y hasta
encabritarse uno? Pero, ¿es que nos toman por tontos? ¿Puede haber prepotencia
mayor que andar haciendo lo que les den la gana, abusando de todo el mundo y
ellos saltándose a la torera toda norma, las mismas que exigen a raja tabla y
sin consideración, y encima justificando lo que no tiene ni nombre, ni
justificación válida y por si fuera poco culpando a los pobres y desgraciados pastores,
de lo que éstos les han obligado a hacer, es decir:
matarles las cabras, y ello
porque se les haya escapado alguna de ellas, que son las que juntas en los
riscos, y desperdigadas, porque no aceptan estos animales sino a sus parejas y
crías, de entre todos los rebaños de donde se han ido forman el ganado guanil,
el mismo que ellos -aun teniendo dueño- se las matan? Cabrearse el poco, es
para exigir justa reparación y el castigo pertinente y la dimisión
consiguiente. Nos han engañado, actuaban a la chiquita y callando -yo (un servidor)
lo sabía, pero me faltaban pruebas, y no podía descubrir por secreto de
confesión, por miedo del dador de la información a represalias y más multas y
castigos-, como los que no han roto un plato, y estaban cometiendo un delito
que no soy yo quien lo tipifique, pues no soy letrado, aunque sí estudié -como
es lógico Derecho Canónico, que incluye el otro y otros comparados y demás,
pero sin más, que esto le toca a otros, que desgraciadamente no abren sus bocas,
salvo para gritar como condenados: ¡¡gollll...!! Y el gran y único gol, es el
que el cabildo ha estado metiendo y metido por la puerta de los rediles,
corrales, alpendres, cuevas, majadas, etc. En vez de premiar a los pocos y
mayores pastores que nos quedan, les matan las cabras, con el único fin de
seguir con el negocio redondo de las importaciones, que es lo único que les
interesa a estos desalmados y desgraciados -porque es que no tienen ninguna
gracia-, quienes cometen tales delitos, y que nada dicen sino justificar que
por mor de un reforestación que se come las cabras ¡eso es mentira!, van y las
matan, y encargan rifles silenciosos y gentes venidas de fuera –un secreto a
voces descubierto ahora, pero viejo en esta práctica bien disimulada-, de
españa, para pasar desapercibidos, y cometer el gran cabricidio. Lamentable y es
para que dimitan y cojan las chaquetas, que seguro ya las tienen con carteras
bien llenas de dineros –que les entregaba la miserable europa por ello-, pues
no cejan de multar a todo el que tenga un animal o en la tierra haga algo -toda
la isla es ya la finca única del cabildo matacabras y tabaibero- porque nada
dejan hacer y tienen todo controlado, vigilado por medio de un auténtico ejército
que se mueve en todas las direcciones -tropezándose o cruzándose entre ellos
mismos, sin dar un palo al agua- y a todas horas, y solo saben multar (nunca
asesoran, explican, informan, enseñan, avisan, sino ¡multa que te pego! ¡Y qué
multas!). A muchos les ha costado la vida por suicidios, al no poder hacer
frente a tales cuantías desorbitadas, y ellos campan a su aires matando a
troche y moche, y usted, no mate un baifo para comérselo, por más hambre que
tenga o porque prefiere una baifa para criarla, porque también por eso te multan
(y tanto que tendrás que vender el rebaño y así y todo no llegas a pagar todo),
con lo cual ¡la soga, antes de ir a la cárcel, por más que dejen viuda e hijos!
Tienen aburrido al campesino, no los dejan ni respirar, y encima: ¡les matan
las cabras y se las dejan para que se las coman los cuervos que no existen!...
El Padre Báez, que se cabrea justamente, aunque en
ello por un infarto me marche, justo lo que ellos quieren: callarme, pero
muerto seguirán hablando mis escritos, grabaciones, libros, comentarios, etc.,
pero morales, sigue callando y con él, su consejero y otros.
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Germán Ramos
Ramos Espero que a lo
largo y ancho del día de hoy lunes digan algo, aunque sea mentira piadosa. Malo
no sería que lo hicieran pronto, pues "la bola de nieve" sigue
creciendo.
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