diálogo

Conversación habida entre europa y el cabildomatacabrasytabaibero...

... sucedió, este diálogo, ya que europa quiso ver dónde plantaban o reforestaban, porque mandaban un pastón y como que las fotos no les convencían y vinieron a ver dónde estaba plantando. Entonces, vino europa al gran tabaibbal y esto fue lo que se habló:

e.- ¿dónde están ustedes plantando lo que sea?

c.- ¡pues vengan y lo verán!

e.- ¿y hay que subir allá arriba?

c.- ¡pues no hay otro remedio, si quieren verlo!

e.- ¿y si subimos en helicóptero?

c. ¡bueno, es una solución! Precisamente también nosotros subimos por ese medio, ¡y las plantitas también!

e- ¿cómo?, ¿que las plantas y ustedes suben en helicópteros?

¡Con razón gastan tan pronto la ayuda que les mandamos!; pero, ¡no es para eso!

c.- es que nuestro personal está compuesto por jóvenes de la capital y si suben a pie, no llegan y además se nos pueden accidentar, por lo que...

e.- pero, ¿y por qué suben allá arriba tan alto, teniendo terreno vacío más abajo?, ¿acaso hay allí agua?

c.- la de la lluvia cuando llueve, pues para eso plantamos pinos, porque nos hemos creído la mentira de que cuando plantamos pinos llueve, y entonces se regarán solos...

e.- ¿y mientras?

c.- mientras, tenemos un problema...

e.- ¿otro?, ¿cuál?

c.- ... que a los pastores se les han escapado algunas cabras, que se meriendan lo que plantamos...

e.- ¿qué sus cabras comen pinos? Entonces es una raza especial y única, porque en el mundo ninguna cabra come pinos, ¿las de aquí sí?

c.- ¡bueno!.., o se rasca en ellos y los parten...

e.- ¿cómo es eso? En unos pinitos pequeñitos, se van a rascar las cabras?, ¿no lo hacen en los riscos?

c.- ¿ehhh...?

e.- ¡que eso me suena a trola!

c.- ¿qué?

e.- ¡que eso es una mentira más grande que Los Hogarzales! ¡Venga subamos al aparato y veamos!..

- llegados a la explanada donde unos misteriosos círculos, atribuidos a los guanches y que son las piedras agarrando las tiendas de soldados que subían a pie y acamparon allí...

c.- ¡ya llegueeemossss...!

e.- ¿y dónde está lo que ustedes dicen que han plantado?

c.- ¿qué?

e.- ¿qué dónde está la reforestación, si aquí antes nada hubo, y nada es posible pueda haber?

c.- es que..., es que...

e.- ¿qué?

c.- que..., que... ¡las cabras se los han comido!...

e.- (de broma): ¡pues maten las cabras!, ¡vamos bajemos! También les vamos a rebajar el dinero que les mandamos, porque para esto...

c.- no, nosotros matamos las cabras, y ya verán ustedes cuando vuelvan un bosque allí, allá arriba...

e.- ¿un bosque en aquellas rocas y sin agua?; además, con ese sol y viento, ¡allí no pega nada!

c.- ¡sí, sí...!, al principio del mundo allí habían cedros y los vamos a volver a poner...

e.- pero, ¿ustedes están locos?

c.- nosotros no, las cabras...

e.- ¿las cabras locas?

c.- (cantando): ¡cabra loca, cabra loca..., y el cabreo que las toca!...

e.- ¿qué dicen?

c.- lo que usted ha dicho: son cabras locas y se comen lo que plantamos...

e.- pero, ¿ustedes creen que somos idiotas?

c.- ¡no por favor!, sino que matamos las cabras...; y, ustedes, ¿nos siguen mandando dinero?

e.- ¡bueno!... ¡eso ya lo estudiaremos!

c.- por favor, no nos hagan ese feo: plantamos, reforestamos, matamos las cabras...

e.- (por lo bajo): ¡están como cabras!

c.- ¿qué ha dicho?

e.- que sí, ¡que está bien!

c.- (saltando de alegría): ¡qué bueno!, ¡qué buena es mamá europa, nos van a seguir mandando “monis”!

e.- ¡euros!

c.- ¡eso, euros!, ¡muchos euros!

e.- ¿y las cabras?

c.- ¡las matamos!

e.- ¿y los pastores, la gente...?

c.- no, no se van a enterar, porque encargamos a la península española unos francotiradores, con silenciadores en los rifles y nos las cargamos...

e.- (en baja voz): ¡están como cabras!, ¿los matamos?

c.- ¿qué dicen?

e.- no, no..., ¡nada!

c.- ¡ahhh...!

El Padre Báez, que les advierte, cualquier parecido con la realidad, es pura casualidad, pero más o menos fue así según las fuentes de las que dispongo. ¡En serio!

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Cabe la posibilidad, tal vez, a lo mejor, ¡quién sabe!, no sé:

Querido Padre Báez. Cabe la posibilidad de que la fascista y pepera delegado del gobierno vandálico colonial y española Hernández Bento haya dado la orden de traer fusileros y asesinar nuestras CABRAS GUANILES y de paso le echa la culpa a Antonio Morales para desprestigiarlo. 

Nerón Emperador romano dio la orden de incendiar Roma y le echó la culpa a los CRISTIANOS.

Salud. 

Todo es posible en una colonia española. Los vándalos son sucios, mentirosos, ladrones, y asesinos.