Segunda
carta abierta a Morales, por si tengo más suerte y me contesta ahora...
... que lo hiciera Bravo - “¡y conejo ido, palos a la madriguera!”
-..., pero que usted siga en esa misma postura y actividad, es sumar aquello
más esto, al cabildo que avanza en la misma dirección; y, ¡ya es demasiado! (me
refiero -como es fácil suponer-, a las cabras que siguen matando, o van a
seguir en ello, mientras no digan lo contrario, y que uno sepa ¡de eso, nada!).
Es decir justifican lo que han hecho, y se han quedado tan tranquilos (usted y
su consejero matacabras), culpando a los pastores y refugiándose en europa (que
ya les he informado a sus distintos presidentes de la situación, ¡ya les
llegará noticias!), pues digo, que si lo hizo el Bravo, como que “a
toro muerto” (por lo de “bravo”), cabra viva (¡moral!, amigos), que lo
hiciera el otro, como que ya pasó esa guagua, el caso es, ¿que lo haga usted?
Usted, en quien el Gran Tabaibal (antes Gran Canaria) todo, puso su confianza,
y ello al cien por cien. ¡La de veces que he oído aquello o esto!, de: “¡ahora
sí, con Morales, esto va a cambiar!”, Pues, ¡mi gozo en un pozo!, y
cierto, no se equivocaban; esto ha cambiado sí, para y en peor. Y es el caso
que. ante tanta decepción -como los que aclamaron a Cristo el Domingo de Ramos,
cuatro días después, pidieron su crucifixión- hoy el Gran Tabaibal entero pide
a gritos su dimisión (o muerte política). No puede seguir al frente de una institución
que debe velar por su patrimonio arqueológico, natural, histórico, ganadero,
etc., etc., alguien que contrario a lo dicho -y más por decir- se dedica a
matar cabras; no, no nos vale un presidente así, y es esa la razón, por la que
el pueblo soberano -en democracia monárquica- pide su dimisión, ¡coja sus bártulos,
y márchese sr. morales!, le falta categoría moral para seguir al frente de un
cabildo que mata cabras, mata todo, hasta -indirectamente- a humanos. Piense en
los que se han suicidado por sus graciosas multas, porque gratis, se lo han
llevado ustedes y sin delito por parte de todos los inocentes -todo hombre de
campo, sin excepción de uno solo-, ha sido multado por su miedoambiente y
auxiliado por el seprona de Ahumada. Usted, morales -sr.- ha perdido la
confianza; razón por la que le pido por favor, dado que ha decepcionado, nos ha
engañado, plantéese el dejar el puesto a
otro; que de seguir su huella haga lo mismo, también se marche o mejor no
entre. Creíamos -todo el mundo- que morales iba a favorecer la ganadería, y
¡acaba con ella!, y... “¡nos salió rana!, ¡nos salió el tiro por la
culata!”
El Padre Báez, que sueña con un cabildo que vuelva a
ser grancanario, que respete a las cabras y si algo sobra, son las tabaibas,
defienda a las primeras y arranquen las segundas, y ni por unas, ni por otras
sigan poniendo multas, que este pueblo está ya, ¡más que quemado!
----------------------------------------
“... que rija al pueblo con justicia... que
los montes (y riscos) traigan paz...” (salmo 71). /
“... han arruinado la tierra... se
estableció el poderío...” (Ap. 11, 17-18; 12, 10b-12a).
No hay comentarios:
Publicar un comentario