se le...

“Se le fue el romeo”, con referencia...

... a que ya no está bien de la cabeza, a que se le olvida las cosas, a que no recuerda y dice disparates; que en cuanto en otro sentido: “lo está rumiando”, como que se lo está pensando, o que cavila sobre un asunto y se le ve cabizbajo, pensativo.

Dos referencia a las cabras, pues como rumiantes que son, no son las únicas, que llevando cuanto come de forma directa y sin masticar a la panza, ya en reposo, por lo general echadas, comienzan a rumiar, o a romiar, es decir a masticar poco a poco, sacando de la panza y llevándolo entre diente a asumir, triturar, masticar, etc., para pasar luego al compartimento adecuado del estómago de las mismas, en cuatro partes, como recuerdo de cuando estudiante en bachillerato, éstas y otras cosas referentes a los animales, era de lo más normal, al vivir en una sociedad de lo más rural, por más que se viviera en Madrid capital, que venidos al presente, cuando y donde se les ha dado palos de muerte a la ganadería, eso de rumiar, queda sin traducción, o fuera ya de uso dicho verbo.

El Padre Báez, que de las cabras más allá de otros beneficios (leche, queso, baifo, estiércol, zalea, etc., etc.), están esa aportaciones a la lengua hablada con el verbo que hoy (ahora) nos ocupa. De las cabras, tanto, y tanto, que desapareciendo ellas, daremos palos de muerte a palabras que se quedarán en desuso, y ya en total incomprensión, pues si al cualquiera le dijéramos: ¿qué rumias?, nos preguntaría: ¿y eso qué es?

--------------------------------------------------

Cosas de la fraternidad: ¡este Paco (Don Francisco) Martel, es de oro!:

Fernando, la paz del Maestro pero de la buena. Espero que estés bien  y que sigas rezando por los amigos que yo hasta le pido al Maestro que cuide del ganado. Mi salud sigue casi igual y esto se alarga. Sigue tu siendo creyente  aunque a veces tengas que quitar tacos de los que mi madre decía: “¡eso no se dice...!” que Dios nos bendiga con un Domingón a honor Suyo: Paco.

“... encubren maldad y opresión...” (salmo 9B). / “... obrad rectamente...” (Tb 13, 1-10a). / “... todos se extravían, igualmente obstinados, no hay uno que obre bien, ni uno solo... malhechores, devoran al pueblo como pan...” (salmo 13). / “... hay hombres que son detractores... procuremos obrar con rectitud” (de los sermones de san Agustín, cannarii y obispo). / “... ¿hasta cuándo amaréis la falsedad y buscaréis el engaño?...” (salmo 4).