Destruyendo...

Destruyendo el tabaibal:

Hay que tomar conciencia del maltrato que damos al tabaibal. Hemos perdido la sabiduría de nuestros mayores. Destruimos nuestro archipiélago o islas. El mayor enemigo, es un hermano de esta tierra, que te ataca irracionalmente, porque hemos perdido hasta la inteligencia. Ya no hay amor, ni compasión, sino odio y agresividad; somos (o son), peores que las fieras. Nos volvemos (se vuelven) salvajes. Cada vez, hay menos preparación científica, y aflora la brutalidad animalesca propia del ser irracional que llevamos (o llevan). Se ha perdido ya la sensibilidad humana. Los hay que no aportan nada, sino crítica mortal y rabiosa; parecen perros.

No estoy nada seguro, se pueda salvar el tabaibal; creo, está desapareciendo. Se hace tarde. No se toman medidas; no se hace nada, para regresar a la normalidad, todo son trabas y dificultades. Los jóvenes huyen del campo; los niños, ni lo imaginan. El único animal que se protege y defiende es al perro. No se respeta la naturaleza, la tienen tan protegida, que no se la puede ni tocar. El medio ambiente, es asesino y criminal: acaba con todo. Los políticos, no hacen nada por cambiar este estado de cosas. Desde hace ya mucho, el campo no es lo prioritario (sector primario).

Los que ahora son niños, cuando les toque gobernar, tal vez, se vuelva al campo, cuando ya no quede testigo alguno del mismo. Comenzarán de nuevo, de cero. ¿Será alcaldesa, presidenta o alguien con poder, la que ahora con 3 años de edad, huérfana de padre, porque lo multaron con 300.000,00 euros y seis meses de cárcel, por ensanchar un camino, para cultivar su tierra, haciendo memoria de su padre al que se ahogó, por lo dicho? ¡Puede!, pero no llegaremos a verlo. El objetivo ahora, está enfocando al monocultivo turístico, al que llaman “sector primario”, borrando al otro.

¿Se volverá algún día a comer y vivir de lo que produzca la tierra? Medio ambiente, está destruyendo el medio ambiente. Hemos perdido cerebro. No se respeta la forma de vida, que ha sido la única y misma que ha habido desde que hay vida en la tierra. Ahora hablan de “huertos urbanos”, de “huertos escolares”, pero no de agricultura en el campo. El hombre del campo, ya no tiene libertad; vive perseguido y observado. Nos faltan alimentos. El tabaibero, se ha degradado; ha perdido especialización. Y fuimos, los seres más inteligentes del mundo (Le Canarien 1402). Pero, actualmente, nuestro cerebro, no trabaja.

El Padre Báez.