Arrepentido pido perdón...
... por la defensa absurda e irracional que he hecho de
las cabras, cuando son demasiadas, son tantas que nos impiden hasta respirar, y
ellas o nosotros, y ante tanta terquedad, he tenido un rayo de luz, y he
comprendido que si algo sobra, son las cabras, que teniendo tanta leche de
tabaibas y de cardones, ¿a qué esa leche de cabras envenenada, porque sin
control por parte de los veterinarios, estas cabras pueden acabar hasta con
nuestra salud y vida, así que sobrando las cabras por perniciosas y dañinas, hay
que desaparecerlas del mapa del gran tabaibal, donde sobran las cabras y hacen
falta pájaros azules y culebras del Canadá,
que nada dan y son mejores que las
cabras, que dan pena, y son repelentes en balidos y cagarrutas, que afean el
paisaje, y se comen las tabaibas, que están protegidas y son endémicas, pero
toda vez un servidor equivocado sobre este asunto nada sabe decirles en verdad,
no deje de asistir esta tarde a unas jornadas para hoy y mañana, ocho horas de
cabras, para convencernos acerca de su peligrosidad y violencia que ejercen
sobre el terreno con una erosión tal que varían la morfología del terreno y hay
que acabar con ellas, o ellas acaban con nosotros, porque súper-productoras y
reproductoras, son una pasada, cabras por todas partes, cabras que nos molestan
hasta para caminar, las tenemos por todas partes y esto es inaguantable, algo
que supera la capacidad del terreno tan limitado, porque si esto fuera un
continente estaría normal, pero en espacio tan reducido como es una isla, ellas
lo copan todo, y no permiten la plantación de un pino más, y hay que arrancar
las cabras, y plantar perros, cuya leche femenina de los canes, es muy
digestiva, huelen menos mal, y son animalitos de dios de compañía que comen
carne con arroz, y son una ayuda a enfermos y ancianos, las cabras son pestosas,
son antisociales, balan, caga, se prostituyen..., y no, no; más cabras, no;
mejor: ¡ninguna!
El Padre Báez, invitándoles una vez más a que no falten
esta tarde de 4 a 8 en el Obelisco, salón de actos de la escuela de los
maestros, y allí tendremos sendas charlas sobre las cabras y cómo son un peligro
para la biodiversidad, razón por la que hay que eliminarlas a rifles andaluces,
exactamente desde Granada: ¡tiro a la cabra, y dejarlas heridas sufriendo, que
aquí no rige la ley de mal trato animal, eso aquí no rige; las cabras, ¡que
sufran, mamonas!
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Por supuesto, que se trata de baifos y no de cabritos,
eso es de p´ fuera:
Suscribo la estupenda
comunicación del hermano Francisco, menos el epíteto de "cabritos"... es una
"manía" que tengo desde pequeño🙏🏿
Buena jornada,
Buena jornada,
Juan Antonio Santamaría
Alonso – Sacerdote.
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Y del mismo hermano, al que
no le falta razón (pero es frase de un ateo, y así como se burla de los
creyentes; y a uno, que no le gusta quitar nada de lo que recibo, pues, ¡ese
gazapo que se escapó!):
No me ha gustado su
expresión..."el pueblo abandonado por Dios..."
Buena
jornada,
Juan Antonio Santamaría
Alonso – Sacerdote.
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