LLEVA UN ...

Lleva un año, y salvo matar cabras...

... ¿qué ha hecho? ¡Ah, sí, ir a comer queso por los pueblos en distintas ferias!, pues como el carnaval, las del queso, duran y duran, pero... curiosamente no son quesos de leche de burras, ¡que algunas quedan! Pues, decepción total, porque nada ha cambiado sino a peor. Y lo peor, es que no escucha, y si escucha no contesta, porque le llevo mandando correos casi un año, y no me ha contestado, ¡ni uno!

Y mira que uno, le brinda soluciones, pero, ¡quiá!, el niño, no admite sugerencias. Y así, en lugar de desarrollo, nos ofrece sud-desarrollo; el único plan que ha tenido -hasta el presente- es quitarnos lo mejor que tenemos: las cabras libres, echándose en pleno en contra a toda lo sociedad tabaibera (antes canaria), y parte del extranjero, y tanto, que éste no repite, ni de milagro que sucediera, lo van a echar como agua sucia (y lo siento por él, pero es que se lo ha ganado a pulso). Y no se puede estar construyendo castillos en el aire o con el aire. Y está más que claro, que no acepta ni admite consejos (sino de un muy mal consejero), advertencias, ni evidencias, sino cabezonería y ¡arre burro p´lante!: a matar cabras, sin ton ni son. Y se ha echado a todo el mudo en contra, hasta a los mismos del cabildo, todos. Con Morales, vamos p´ atrás, como los cangrejos. Proyectos y planes fantasmas, no les falta, pero necesitamos pise tierra y respete a las cabras, y se deje de plantar basuras, que encima las deja secar y solo piensa en ordeñar (en lugar de a las cabras) a Bruselas, con engaños y mentiras, con endemismos y cosas autóctonas que no existen, pero que existieron y que menos van a existir, matando a las cabras, como las tabaibas, que las tiene súper-protegidas como manera de engrosar las arcas cabildicias por multas astronómicas que suicidan a los multados, ante la imposibilidad de pagar y no querer ir a prisión. Morales, no tiene otro plan, que acabar con el sector primario, ya sea agricultura y ganadería, y en ello tiene sobresaliente, pero arruina y asedia a la isla; pasa, que las multas le proporciona fondos con los que pagar a un enjambre o ejército de auténticos parásitos, que salvo pasear en coches con rayas de colores propios, todo el profano día (santo, si tuvieran fe), sin dar golpe, sino poniendo multas a todos, por todo, y por nada. Aumenta el paro y el hambre y no prevé nada. Cree que el turismo nos va a sacar de la miseria y nos hunde más en ella, ¡y no lo ve! Están ciegos, sin asesores que les aconseje, pues funciona la dictadura. Mal se nos presenta el futuro, y peor, sin freno. Solo piensa en el gas, que a nadie le preocupa, ¡a saber qué interés se le sigue en ello (algún día se sabrá)! Parece un adorador del dios Eolo, a quien da culto. ¡Menos mal que paró el tren, pero va a velocidad de rifles a acabar con las cabras (las mata o las dan para que se mueran)!, y luego me dice, que estoy como una cabra, pues balaré.

El Padre Báez, que ve un cabildo sin desarrollo, en manos de quien tiene frenado y con marcha atrás a esto que no funciona.