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Cambie su perro por una cabra...

... (o tenga a ambos), y tendrá leche de cabra con mierda de perro, a la par. Y bascule y compare. Con ambos, puede salir de paseo, como una feligresa de mi Parroquia, que sale a pasear en su carrito al niño, y aquella baifita que crió desde chica, hoy ya cabra, y dando leche, la sigue en el paseo como si fuera un perro.

Con la cabra, además de leche, tendrá queso. Pídasela al cabildo, y a lo mejor -con un poco de suerte- se la dan, y no solo a usted, sino a cuantos las soliciten, con lo cual no volveríamos a ver andaluces tiradores de rifles, pegando tiros, y si quieren desaparezca la biodiversidad -y por tanto los endemismos que no existen y lo que sí hay- en el Macizo del Noroeste y limítrofes, pues que desaparezca la flora, pero que no las cabras, que debemos pedirlas antes que las vuelvan a matar. Sugiero, pues, pidamos las cabras al cabildo, y a lo mejor van y ceden. Saben ustedes, mis amigos, que comida para cabras hay de sobra, y es gratis (no así la carne con arroz, para perros). Sea este el lema del cabildo, en lugar de pegarles tiros: “¡ponga una cabra en su vida!” Y asunto solucionado. Le sale a usted, una cabra gratis, y le saca del hambre, a la par que el perro (que también puede tenerlo), es una ruina. Ni su mierda sirva para nada, no así el estiércol de la cabra que le dará las mejores hortalizas, aún plantadas en la azotea, o pasillos, y si tiene patio, pues allí. La cabra, lo mismo, dependiendo de dónde viva, pero hay solución para todo. Sabe, el perro come carne, la cabra hierba. La isla está llena de hierba por todas partes, y tanta que te impide caminar, de altura por partes hasta de dos metros. La isla está verde de hierbas por todas partes y seca en lugar de comérsela el fuego (¡Dios nos libre!), se la coma antes las cabras, “nuestras madres y hermanas (las cabras)”. En la tierra: colegias, cerrajas, jaramagos, etc., ¡delicias para las cabras!

El Padre Báez, ofertando solución doble: al cabildo para que no las mate, y al pueblo para que mate el hambre. No más una sola cabra matada, que el pueblo las quiere, las recibe, las cuida..., la cabra -no lo olvide-, también es animal de compañía.