La importancia de cualquier hallazgo, puede ser un descubrimiento sorpresivo y de gran interés. Puede que sea algo hasta ahora desconocido, y de nuevas pistas sobre los guanches. Cinco siglos antes de Cristo y hasta quince después de Cristo, se entierra gran parte todavía. Por tanto, se trata de unos veinte siglos de nuestra propia Historia.
Creo, que todavía nos encontramos en pañales, y hay mucho territorio virgen, por excavar, que arrojarían mucha luz, sobre nuestro pasado. Pasado, que algunos han convertido en pesado, al ponerles encima unas planchas de hierro, tal vez significando la resistencia de los guanches frente a los conquistadores, pero como que no...
Poco sabemos de la corte de los Guanartemes. Hay mucho por descubrir. La arqueología es imprescindible –junto con la Historia-, para conocer nuestra cultura. Un sistema político altamente desarrollado. Hay mucho por investigar.
Me parece, que tantas excavaciones paradas, debieran reanudarse; siendo esto, algo prioritario siempre y cuando se cuente con profesionales serios, que en lugar de beneficiar y respetar los yacimientos, los empeoren y dañen, como es uso y costumbre, y no es cuestión de volver a citar lo de las planchas de hierro, pero están en ellos, sin venir a cuento.
Toda la isla es posible excavar, pero hay que explorar antes, aquello que ya ha aflorado. Sería bueno, la universidad se implique en esta tarea, que le es afín, en cuanto a cultura y ciencia. Hay que seguir la ruta de los guanches, que para ello, nos dejaron bastantes huellas.
El Padre Báez, que añora, no se descubra, y se tenga en espera, lo que es patrimonio, y por tanto lo primero.
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