POR FIN: MAURICIO:

    Como “no hay dos sin tres”, que dice el refrán, un servidor, vuelve sobre el caso Mauricio, y ello, porque –según creo- se acaba el culebrón, y de ahora en adelante, vamos a ver de qué o de quién se van a ocupar, los de la Prensa sensacionalista, hermanada con la prensa rosa (la misma que vierte sobre el Tabaibal (antes Canarias), toda la mierda y basura de espakistania a través de 10 minutos y pronto), que acabado el asunto Mauricio, antes de lo que ellos pretendían -para poder seguir entreteniendo al personal, dándoles ocasión de opinar sobre el caso-, henos aquí, que acabado tan de ramplón este asunto, no he visto hayan sacado conclusiones, que para un servidor, es lo mejor de este hecho o hacer; que, si mi admiración y respeto por Don José Carlos, era grande, ahora lo es todavía más y mayor; pues rara vez, se podrá uno encontrar con un señor de pie a la cabeza, como el presente. Pues podía haber rezumado venganza y odio, y hay que ver, ¡qué gentileza, qué  ecuanimidad, qué serenidad, etc., para responder (¡otro hubiera dado la callada por respuesta!)!, y si analizamos lo que Don José Carlos ha dicho, después de la sentencia, es de antología cívica, el mejor retrato de su personalidad como político, que comparado con él, no le llega ninguno, ni a la suela del zapato. Y, ¡vamos a ello!

    Es, la primera vez –comento lo que dice el Can7, el mismo que lo pone con cara de perro en la peor foto que pudieron seleccionar de las muchas que le hicieron- repito, es la primera vez, que en mi vida de largo lector de la prensa, leo que alguien públicamente, reconozca haber cometido un error y que paga por ello. A mí, que alguien me diga: ¿cuándo, cómo y dónde jamás, haya reconocido alguien su culpa a pesar de la judialización de la vida, teniendo por protagonistas en el 90 % a los políticos (¡la primera vez, que un  político inocente, reconoce su culpa!). ¡Que distintos todos aquellos, que siempre intentan justificar sus gravísimas faltas!; que –continúo- no arremete Don José Carlos, contra una prensa que lo ha linchado, porque se hubiera puesto a su misma altura, y está claro, que su catadura moral, está muy por encima de los que lo han crucificado –o como él mismo dijera- si cual “hereje”, lo hubieran echado a la hoguera (les recuerdo que eso, era la práctica de la inquisición civil, por si no lo sabían, y que derivan a la Iglesia); que el periódico citado -y el otro- han repetido cual disco rayado cada día la misma información, sin adelantar un solo nuevo dato -que ha sido como marear al perdiz-, que Don José Carlos, como los que asistimos a Misa, reconoció su culpa, y sale enriquecido ante una experiencia más en su vida, que le ha madurado más aún si cabe; la única queja de Don José Carlos, es la fuerte suma, que tienen que pagar –sin poder- sin haber matado, ni herido a nadie, y teniendo que pagar cada mes 480,00 €, debieran a medias pagarlos los de la prensa, ya que de él han vivido –en parte- durante una semana, ¡y lo que rondaré morena!, porque me imagino, andarán ahora al acecho, a ver si paga o no esta mensualidad; que acepta Don José Carlos y respeta a la justicia, y tiene la gallardía de mostrarse como ejemplo de lo que no se debe hacer, y lo más valioso, que no arremete, contra los que socialmente lo han juzgado con tanta o mayor severidad, que la de su señoría.

    Que por parte del otro -La Provi-, más indulgente en la foto, repitiendo lo mismo, como quien se copia uno del otro, y no sabemos quién del cual, salvo minúsculos matices, éste, recoge –también- lo de “hereje” (aquí, el subconsciente traicionó al Don José Carlos Mauricio, pues en el fondo... (¡mejor me callo!); y comenta lo de Don José Carlos, que hace referencia al doble juicio o castigo, que le ha propiciado la prensa, a la que califica de crisis, y de vendetta, pues vivimos –para nuestra peor desgracia-, un periodismo, que ha caído en el modelo de pronto y 10 minutos –esto lo digo yo- que practican el “paparazzismo”, y que aún siendo comunista -lo peor para Franco-, éste, no lo trató peor que ahora en la democracia. ¡Pues toma caldo si no quieres dos tazas, ahí tienes tres!, y que Don José Carlos,fue, uno de los dos que cada día la policía coge conduciendo sin carnet, y de los que no se nos dice nada, pues ¡viva la democracia, en la que como acabamos de ver, no todos somos o son iguales! Así, que cada día hay dos nuevos “mauricios”, de los que no se nos dicen nada, y dos cada día, es raro, alguien de nuestra familia y apellido no esté en ello.

    ¡Ah, me se olvidaba –como dicen los de pueblo, allá en espakistania- que el Can 7, que me lee y escucha, por primera vez hoy, haciéndome caso, ha puesto a Don José Carlos Mauricio el segundo apellido “Rodríguez”, y es que quería él tuviera un “Rodríguez” de chófer, para entonces, enterrarlo vivo.

    Y, un último dato: nunca vi un despliegue mayor de periodista, en ningún evento, mayor que en la salida del juzgado, para un caso tan baladí o insignificante; cuando el campo a gritos espera que alguno de ellos –los periodistas- recojan la situación de acoso y desaparición del mismo, persiguiendo a quien ose cortar una retama, o tenga una cabra a menos de un kilómetro de su casa, y la tenga con una bola de acero en la panza, para controlarla, y así si se muere, llevársela a enterrar a Zaragoza, sobre lo que ningún periódico ha dicho, ni media palabra; ¿por qué será?, ¿temen acaso, les retiren la publicidad y ofender a la voz del amo?

    El padre Báez, que hace lectura de alguien que machacado, no responde de igual modo, porque si algo queda claro, es que su catadura moral, es muy otra, y bien distinta a la de los que lo han masacrado.