Mucho se ha escrito, sobre el trenecito, que quieren poner hacia el Sur, pero nadie ha dicho lo más mínimo sobre los yacimientos
arqueológicos que dicho “juguete” y “capricho”, se va a cargar. Son muchos los yacimientos, que se van a ver afectados y dañados
por dicho tren, a no ser que cambien su vía férrea o ruta.
Mucho ingeniero y demás, pero ¿y dónde están los arqueólogos del cabildo, el mismo que promociona el tren?, ¿calladitos, para
no molestar al amo? ¿Acaso no les preocupan, que el tren pase y pise los yacimientos destrozándolos? ¿Es que no está por encima y
delante del tren, el patrimonio arqueológico e histórico? ¿No ven, que el tren va a pasar por encima de un montón de lugares con
valor arqueológico, que deben proteger?
El tren, va a afectar a nuestra cultura; razón por la que ese proyecto, debe ser parado. hay que salvar de la especulación a los
yacimientos. Y corra el tren por el mar. La arqueología está antes que el tren. No se puede trazar una vía férrea –¿será por eso, por lo
que en los yacimientos ponen planchas de hierro, para ir sensibilizándonos? ¿Lo permite la Ley, o se la saltan?
Hay que tener en cuenta, más allá de lo económico, lo que es de interés mayor y público; no se puede permitir, el tren impacte
sobre los yacimientos, ni ponerlos o dejarlos en peligro; hay que conservar la arqueología, ningún yacimiento puede ser afectado
por el tren.
No se ha contemplado el impacto de las obras para el tren en los distintos yacimientos que atraviesa, y esto es motivo para pararlo
o desviarlo; hay que cuantificar los impactos del tren sobre el patrimonio, y procurar no le afecte en lo más mínimo. Razones estas,
que no hace recomendable un tren a costa de tanta pérdida o agresión.
El Padre Báez, que advierte que el tren va a afectar gravemente a los yacimientos arqueológico, y eso no se puede ni debe permitir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario