muerte

La tabaiba siega vidas…

 

… lo que hoy se ve en la isla -las islas- no se había visto antes nunca. Actualmente, las islas son un área tabaibera en exclusiva, y tanto que impide el hábitat de otras especies, incluida la humana. El daño de la tabaiba -las tabaibas- es indiscutible, está a la vista; lo cual no deja de ser el peor crimen medioambiental ocurrido en nuestra Historia, con este último capítulo, que es de muerte total (nos iremos, para que solo vivan las tabaibas). Y lo grave de todo esto es, que es producto de una premeditación sistemática de acabar con toda tierra productiva. Y curioso, que nadie condene esta masacre. Solo hay una “empresa” que castiga a pobres víctimas, que pagan lo que les pidan, sin más. La regeneración del terreno es algo ya imposible; está todo envenenado con la leche de dicha arbórea. Limpiar su terreno de la maligna tabaiba es daño a la misma y punible. Los daños de las tabaibas al terreno ya son irreversibles, irreparables. Desaparecen cultivos y flora autóctona y endémica. La tóxica tabaiba se lo come todo y es un riesgo para la  salud. El mayor daño, es el psicológico, solo hay que hablar con la gente del campo, para descubrir de inmediato el miedo que padecen. Desaparece nuestra cultura (agricultura), al paso acelerado de las tabaibas. Estas islas fueron lugares para seres humanos, y están quedando solo para las tabaibas. Se atenta contra el derecho a la vida, que es un derecho humano; ya se perdió el derecho a un ambiente sano; el derecho a la propia cultura, etc. Y el gran problema es que esto no es una lucha del pueblo atemorizado, sino la de un francotirador, y lo peor está por llegar. Es un tema al que los gobernantes se tapan los ojos. No quieren prescindir ni de una sola tabaiba. Ya los grandes perdedores son los campesinos. Y tenemos en juego la vida…

 

El Padre Báez.