Tres
“P” en El Tabaibal
(2)…
“… reanima lo que te queda y
está a punto de morir…” (del libro del Apocalipsis 3, 1-6.
14-22).
“… y se subió a una higuera…”
(Jesucristo Lc. 19,
1-10).
“… malvados que merodean para
chupar como sanguijuelas sangre humana…” (del salmo
11).
“… ¿cuál es su riqueza…? Un
trigo que desarrolla a los jóvenes, un vino que desarrolla a las jóvenes… las
lluvias… da pan al hombre y hierba al campo…”
(del libro del profeta Zacarías 9, 1-10, 2).
“… un árbol plantado junto al
agua, que junto a la corriente echa raíces; cuando llegue el estío no lo
sentirá, su hoja estará verde; en año de sequía no se inquieta, no deja de dar
fruto…” (del libro del profeta Jeremías 17, 7-8).
… Pepé (1),
Pesoe (2) y Podemos (y). ¡Vaya casualidad! Los tres
comienzan por “P”, pero, ¿harán los
tres lo mismo? Y me refiero al campo, a la agricultura y a la ganadería. Las dos
primeras “P”, ya sabemos lo que han
hecho, hacen -han desaparecido el sector primario- e ignoramos lo que van a
hacer, aunque presumiblemente, es posible y casi seguro, sigan igual o lo mismo
y a peor; es decir, sigan dándole palos de muerte hasta acabar con ella, hasta
desaparecerla por completo (me refiero al sector primario, entiéndase
agricultura y ganadería, de la que si de ambas queda el 1 %, es mucho). Es
decir, Pepé y Pesoe (vamos a ponerlo en minúscula pepé y pesoe, y sin negrita
ya), han acabado con lo que nos da trabajo y comida, para darnos paro y hambre,
y así protegida la tierra porque soporta tabaibas, retamas, pinos y otras
basuras, impiden y prohíben toda acción en el terreno, en otro tiempo cultivado
y lleno de animales por todas partes (me refiero a los de cuatro patas, y si de
dos: gallináceas). Pues bien ya tenemos el diagnóstico de estos dos partidos en
retirada, sobre el asunto de producir al menos el 50 % de lo que consumimos y ya
vemos lo lejos que están de cubrir esta necesidad indispensable para sobrevivir,
sin depender de terceros, cuartos, quintos, etc. Pero (que también empieza por “P”, me queda la tercera “P”, la de Podemos, y a esta por la seriedad con
la que aparece por el foro, y aunque nada he leído y escuchado de sus
planteamientos sobre el sector, espero que por dignidad, y por limpios de la
corrupción espantosa que nos envuelve -al presente- permitan la vuelta al único
lugar y medio que nos devolverá el trabajo y la comida indispensables para vivir
con dignidad y sin dependencia del exterior. Así que una tercera “P” (de Podemos), que espero no sea como las
dos que le preceden, y de las que deben marcar distancia devolviendo la vida al
campo y por descontado al campesinado en franca retirada, por si vuelve y
estamos a tiempo de recuperar la sabiduría de la que son transmisores o
portadores, muchas veces milenaria y que es la fuente de la felicidad, al poder
comer y trabajar, justo de lo que ahora mismo y gracias al pepé y al pesoe,
estamos en parados y hambreando de Cáritas el cada vez menos condumio, al ser
cada vez más los parados; por eso desde estos comentarios, ruego a quien le sea
posible hagan llegar a Pablo Iglesias (o a los suyos), para que diga algo al
respecto, y no ya la intención máxima de votos, sino la real y total mayoría en
votación a su grupo o partido (me gusta más Grupo, porque ya lo de partido -con
“P” también-, me suena ya mal, por
la generalidad de tanto mal venido por ellos. Que con Podemos, podamos volver o regresar al
campo, sin ser vigilados, multados, perseguidos, etc., y recuperar puestos de
trabajo y poder comer para vivir.
El Padre Báez.
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Espero no se moleste por poner su nombre y apellidos al
completo, y andar ocultando correos en siglas (buenísimo –todo- pero más lo de
los animales), léanlo:
Padre Báez, no sé si se ha
percatado que estamos en una colonia y que no se puede esperar nada de la
metrópoli, excepto saqueos a nuestra patria. La política de no dejar desarrollar
el sector primario, con la excusa de las protecciones de las plantas endémicas y
otras excusas, no es sólo una estrategia del Cabildo, sino que, el Gobierno de
Canarias, tampoco ha hecho nada por relanzar este sector, pues los intereses
importadores de sus amigos, familiares... y las subvenciones que reciben de
Europa, hacen peligrar sus arcas y su constante latrocinio. Pero no espere usted
por el maná, los asuntos del pueblo los tienen que solucionar el pueblo, y éste
no puede seguir mirando contemplativo y acusando a la tabaiba, quedándose en la
inacción permanente. También le voy a reprochar al campesinado, y sobre todo a
los ganaderos, cómo se prestan por algunas migajas a llevar sus animales a las
ferias de ganado para que los corruptos se saquen la foto. Tenemos un pueblo de
llorones, la realidad es obvia: ¡ya está bien de plañideras, colapsen la capital
con los animales y los tractores y déjenla inoperativa durante días! Sin lucha
no hay victoria. MTLN. Isidro Santana León.
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