alaridos

Mes de mayo (día 24), mes de María…

Mes de la flores, mes de la flor más hermosa…

María, con S. S. Francisco…

María en La alegría del Evangelio (Evangelii Gaudium)…

5. El Evangelio, donde deslumbra gloriosa la Cruz de Cristo, invita insistentemente a la alegría. Basten algunos ejemplos: “Alégrate” es el saludo del ángel a María (Lc 1,28). La visita de María a Isabel hace que Juan salte de alegría en el seno de su madre (cf Lc 1,41). En su canto María proclama: “Mi espíritu se estremece de alegría en Dios, mi salvador” (Lc 1,47)…

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Gritos contra las tabaibas…

 

Una isla donde no se respeta la tierra, y se la entregan toda a una planta dañina; nuestras voces deben resonar contra este crimen. Se trata de una auténtica masacre contra el campesino, se le asesina psicológicamente, para que nada haga y nuestra dependencia del exterior sea total; por eso se le llena sus cercados, cadenas, bocados, parcelas, fincas, etc., de la dañina y mortífera tabaiba. Los periódicos comprados callan. Mientras las tabaibas dominan absolutamente todo terreno. La tierra ya es de nadie; toda del cabildo, para sus tabaibas. ¿Y cómo combatir contra enemigo tan poderoso, con ejércitos tantos, desplegados a su favor? Ni busca el (cabildo) bien común, ni hay modelo alguno de  desarrollo, que pueda satisfacer las necesidades de los pobres, ya todos en distintos grados. No son tabaibas y su leche lo que demanda la población isleña. Tampoco escuchan al pueblo (solo a sus bolsillos e intereses). Con ambición desmedida, han aparcado a la agricultura y a la ganadería, las únicas que nos pueden sacar de la grave crisis, que aquí se empeora o profundiza. Antes se  decía España es de los españoles y parodiando el dicho, Canarias es para los canarios (ahora el Tabaibal para los tabaiberos), pero ahora hay que decir: estas islas, son para las tabaibas. Ya, más de la mitad de la población, vive en la pobreza, pudiendo ser -por nuestro clima y tierra- los más ricos del mundo. Frente a este dato, solo se ve el egoísmo de la corrupción, que solo piensa en ellos mismos. Se desprecian los recursos naturales, ¡únicos y excepcionales en el mundo! Pero ellos, se lucran con lo que entra por el puerto y no dejando de la tierra salga nada. Contaminan con la leche de la tabaiba -en sus raíces- todo el territorio insular…

 

El Padre Báez.