Quiere el cabildo prevenir los incendios, y...

 

Quiere el cabildo prevenir los incendios, y no deja de plantar pinos, y encima tiene prohibido a la gente recoja la pinocha de las orillas de las carreteras, que son un peligro para la conducción, y hasta si se tira una colilla, que los incendios prendan. La verdad, que no sabe uno qué decir. Pues, justo esto: que vamos hacia el corazón del verano, con lo que ello significa; que no es cosa de limpiar medio metro de la raya blanca de las carreteras hacia fuera, de hierbas; que cuando los rebaños andaban sueltos, por más que se quisiera ardiera algo, era imposible al no haber materia ígnea alguna, pues se lo comían todo; que los cortafuegos que hacen, son un engañabobos, ya que con el viento, las llamas que vuelan y crecen los traviesan sin más; que hacer carbón con los árboles que se secan no son, ni es la solución, sino que con ello se aumenta el peligro (leña seca dejada en el terreno por todas partes, pinos incluidos); que la desaparición del pastoreo, es el in crechendo de los incendios, ¡sin remedio!; que como con la pincha tenemos pocas posibilidades, a ella se suma el cañaveral que devora los cercados en el pasado de papas, millo, coles, etc.; ¡pobre de ti (o de usted) si talas (o tala) un árbol cerca de tu  (o su) casa para evitar arda la misma si hay un incendio, ¡te buscas la ruina!; que según opinión generalizada, la quema agrícola que hacen los del cabildo –repito, según opinión generalizada- es la que ha producido distintos incendios; que la misma opinión citada es que no existen pirómanos, al menos que se pueda demostrar; etc., etc., pues ¿para qué seguir con este tema? Para evitar incendios, solo hay una solución, pues ya lo dice el refrán matándose el perro se acaba la rabia, ¡menos pinos y la desaparición de los mismos y la sustitución de ellos por nogales y castaños, los que por más que se les meta fuego, no arden, y de por vida o por siempre, ¡libres de los temidos y asesinos incendios, como sucedió con el último! Pues, a ver si toman buena nota (que por otra parte no es nuevo esto, ni la primera vez que lo digo, y ello, viene de la tradición de siglos). Pues lo dicho: ¿tendremos  incendios? ¡Dios nos libre!, pero, esto es cosa de hombres, ¡y del cabildo matacabras que tenemos y por si era poco estar contra la fauna, también lo están contra la flora, pues se encarga de poner la materia que irremediablemente otra función no tienen, sino la de arder, a no ser que un ejército numerosísimo haga –hace- vigilancia de ellos, y cobrando un pastón, para nada!

 

El Padre Báez, Pbro. 18-06-18