Soria

Soria y las tabaibas…

 

“… siembras año por año, como hierba que se renueva; que florece y se renueva por la mañana…” (del salmo 89).

 

“… pastor que apacienta el rebaño… toma en brazo a los corderos y hace recostar a las madres…” (del cántico de Isaías 40, 10-17).

 

“… ovejas de tu rebaño…” (del salmo 78).

 

“… guías… a un rebaño… preparaste el terreno, y echó raíces… tu viña, la cepa que tu diestra plantó… vigorosa…” (del salmo 79).

 

… que no me refiero al lugar geográfico donde la presa y demás, sino al ministro petrolero contra Rivero, que hablando del turismo, ha dicho una verdad como un templo, pero solo a medias, y es lo siguiente: “… solo el turismo no podrá acabar con el paro en (El Tabaibal, digo yo) Canarias (dice él)”,  y añade: “…que hay que apostar por la industria, que genera empleo más estable…”. Se alegra uno mucho, ver que se comienza ya a dudar de la eficacia y de la productividad turística, como solución para salir de la crisis, pero le da a uno pena ver que estos ciegos que nos mal gobiernan, no ven que la materia para toda industria, sale de la tierra, todo sale de la tierra, es decir ganadería y agricultura, y se le llena la boca a estos babiecas -en general- de industria, industria, industria, pero ¿qué industria es posible si no producimos nada? Veamos: los turistas mantienen y aumentan el paro; el turismo no es motor de nada, o en todo caso un motor parado o a Valentín, pues no genera trabajo y mantiene el paro; el clima debe ser mirado para el cultivo y la ganadería antes que para el turismo; cultura y gastronómicamente nada damos al turista que come de los productos que nos tupen por el puerto y procedentes de sus mismos o propios países, pero nada de aquí; los turistas no nos dan de comer, la tierra sí; los turistas van a provocar siga en aumento la pobreza y consecuentemente el paro; falta trabajo, y el turismo no lo da; el trabajo lo da la tierra (cultivo y ganadería); el producto que necesitamos no lo da los empresarios en abstracto, sino el realismo de los agricultores y pastores que casi ya ni existen unos ni otros;  el Tabaibal, no debe depender del turismo, sino de la tierra y de su cultivo; lo primero no ha de ser los ancianos y enfermos turistas que nos visitan, sino el trabajo en la tierra sea con animales o con cultivos; menos turismo, más atender el sector primario o primero; si solo se cultiva tabaibas, no conozco industria alguna que haga algo con ese potencial enorme y exagerado del solo monocultivo tabaibero, que es de donde solo puede salir algún producto tabaibero aún desconocido y por descubrir. Si lo que Soria pretende es vender leche de tabaiba -por más que pase por industria alguna-, estamos apañados. Al fin palabras al viento, para quedar bien, pero sin aterrizar, es decir tocar tierra, y cultivarla, para darle al turista (y a los lugareños), el mejor producto del mundo, pues sabido es que por nuestro sol, no hay fruta ni hortaliza nos gane en virtudes propias de las mismas, y sin embargo nos habla de industria, ¿industria?, ¿qué industria Soria?, ¿industria tabaibera?, ¿leche de tabaiba?, ¿madera de tabaiba?, ¿comida de tabaiba?, ¿qué puede obtenerse de una planta maldita y envenenadora? No es posible haya industria alguna, si falta la materia prima para dicha industria, y si nada producimos imposible haya industria, a no ser la vuelta al campo genere esa materia requerida para aún la menor industria, porque que uno sepa, nada podemos industrializar con sol, mar, playa…

 

El Padre Báez.

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Viene de otra isla, y dice lo siguiente:

 

Apreciado amigo y compatriota Padre Báez, vengo siguiendo tus denodados y meritorios esfuerzos en favor de nuestra gente del campo, en particular, y ahora también con las que están arrinconando en los barrios de nuestras ciudades. No solo denuncias sino que también señalas a los culpables, que otros no se atreven ni a mencionarlos. (salvo nuestro común amigo…).

A. M.