lunes, 27 de septiembre de 2010

EL LEGADO ABORIGEN DEGRADADO.

 

        Afortunadamente es tanto el legado aborigen que tenemos, que en esto somos millonarios; por cualquier lado que te vires, hay huellas de nuestro pasado, y tanto, que la isla toda, es un museo. Pasa, que en conservación, con el hierro que gastan en "restaurar" un solo yacimiento, tienen para verja y alambres para el resto, pero ¡no señor! arreglan mal uno, y dejan el resto a su suerte. Y parece que tantos hallazgos -cada día más de uno-, como que no les inmuta a los del cabildo, que los coleccionan en confrontarlos, y nada hacen en preservarlos del pillaje, vandalismo, de depredadores o de visitantes furtivos a saber qué hacen en los yacimientos, que deben ser mantenidos intactos.
    Gracias a tantísimos descubrimientos, un servidor, tiene un listado de unos 400 enclaves guanches, de los cuales, solo cuatro, han merecido en tantos años una atención, que mejor, no se la hubieran prestado, pues ya sabemos cómo se los han cargado montando en ellos montañas de hierro. Parece mentira que en tiempos de crisis, cuando tiran el dinero en gesplán y otros planes, cabildo y gobierno, no pongan un vigilante en cada enclave de los más importantes, para controlar las visitas expontáneas y evitar saqueos, daños, movimientos de material, grafitis, etc. (previo cursillo acelerado de arqueología, por verdaderos profesionales e historiadores).
    Tenemos otra, y es que en cada excavación, destruyen el yacimiento original, para recrear otro ficticio y falso. ¡Ya es hora de parar este sistema de excavación! Así sugiero: paren la continuidad en el Maipés de Arriba (hay una gran polémica entre los responsables y el pueblo y público en general). Que dejen el Granero de Guía, a un debate público y no se de validez al ganador del que va a destrozar el dicho Granero, habiendo ideas muy afortunadas, pero despreciadas por los "espertos". Lo de Mogán, ya es irreparable lo que están haciendo y bien harían si pararan ya, para que no se siga dañando nuestro Patrimonio. Que es una gran pena, que despreciando lo que hay, y está en la superficie, se vaya a rastrear los fondos marinos (¿en busca de oro?). Desgraciadamente, de la necrópolis de Juan Primo, queda el lugar, pero ¿y los restos? Pues, nada que vamos a hacer producir la vieja fábrica de azúcar de Agaete (no de los guanches), por mor de la crisis. No hay estudios serios sobre el tema de la arqueología, la gran desaparecida.
    Pero, lo que quiero dejar -por hoy- es que la falta de promoción y de concienciación a la sociedad sobre nuestra inmedible riqueza arqueológica, hace que no tengamos visitantes, ni de propios, ni de extraños a nuestros yacimientos, que yacen en la desidia, abandono, desprotección...
 
    Ayer estuve  -el Padre Báez, con tres estudiantes- en una necrópolis (viéndola desde fuera), y hay en ella tres carteles: uno sobre los pájaros y reptiles en la misma; otro sobre la geología y formación de los barrancos, y la tercera sobre las tuneras y otros arbustos del lugar (de la necrópolis, ni una sola palabra).

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