(136): LO QUE NO HACE EL cABILDO EN ARQUEOLOGÍA

     El cabildo de Gran Canaria, no ha publicado nada, ni siquiera en relato breve, sobre arqueología; ningún medio escrito, hablado o televisado, nada ha mostrado, dándonos explicaciones de nuestra historia, por tanto de nuestro pasado. ya es hora que nos informen y nos comuniquen qué hacen, además de poner planchas de hierro en los yacimientos.

    Otras comunidades autonómicas, sí que publican de forma y manera periódica y regular, e incluso libros que recogen trabajos de arqueología, y que gracias a ellos: el conocimiento de sus antepasados, sus raíces y cultura.
    La arqueología, como la ciencia que nos muestra el arte anterior o primero, y que pertenece a todos, por ser patrimonio mundial, cómo y quiénes llegaron antes a las islas, su historia o primera historia; la cultura o civilización de ellos, y el vivir de cada día, en esos siglos pasados que nos preceden, con las distintas influencias y valores propios, y que pueden ser expuestos de formas y maneras simples y sencillas, para que puedan ser aprendidas por la gente sin grandes conocimientos.
    Miles de páginas lleva uno impresas en sendos libros, y otras tantas –en mayor número- por aparecer, aparte estos comentarios, que forman ya una buena obra, en tamaño y contenidos; y ello sin el dinero que ellos tiran alegremente en nada y por todas partes. Uno, desvelando la vida de los guanches, los primeros ocupantes de las islas Canarias; dando cuenta de los distintos yacimientos arqueológicos, en auténticas primicias y aún escondidos; denunciando los atropellos y los abandonos de otros tantos yacimientos; de restos dispersos de gran valor, por más que no sean sino una cara destrozada de una cueva guanche.
    Se destruye el patrimonio y desaparecen obras inmortales y  de irrepetible realización, por haber desaparecido sus artífices, y todo lo que cabría hacer es restaurar aquello, y no poner planchas de hierro, sin venir a cuento, sin motivo ni razón. Nuestros grabaos, merecen una atención especial, están expuestos al rayado, al pintados, al raspado o ser sobre-escritos, manchados, desaparecidos, sin que medida alguna impida este atropello mantenido en el tiempo, sine día.
    Ya me gustaría no lamentar la pérdida y la destrucción de nuestros yacimientos históricos y arqueológicos, y a nadie convence que sea cosa de pocos dineros, cuando cobran sin hacer nada; nada investigan, y nada evitan para librar aquello que está en peligro de desaparición.

    El Padre Báez, que urge a que los del cabildo, se mojen en asuntos de su competencia, y que tienen abandonadas.