Nuestra paupérrima cabaña, y el
cabildo presumiendo de ella.
Nuestra paupérrima cabaña, y el
cabildo presumiendo de ella. Que teníamos incontables cabezas de
distintos ganados, y ahora escondidos en explotaciones tres vacas, con tres
becerros, y ya sin toros, y nos hablan de exposición en Osorio. ¿No fue usted a
ver aquellas maravillosas vacas y demás bestias del campo? Cuatro vacas, cinco
becerros, para ser más exactos, y van a concurso, y como son tan pocos, siempre
ganan los mismos, y tienen premios (copas) por toneladas, y tantas que de vez en
cuando hacen limpieza y las tiran, pues al fin y al cabo no son sino latones y
chatarrería. Nos dicen que nos exponen lo mejor, y ¿qué es lo mejor? ¿Hay acaso
con qué comparar? Pero, ¡si ya ni siquiera en Osorio ya hay animales, cuando
hasta cerdos tenían; ahora dos ovejas, para enseñarlas a los niños de colegios
cuando van de excursión al lugar, ¡no te digo! Una verdadera comedia. Pues, si
no hay ganaderos, imposible hayan ganados. Eso sí, te los cuentan todos
mezclados y te ponen de todo algo, o de casi nada lo poco que queda, y ya van a
por las mascotas y los perros, que de esto, ¡sí que estamos más que bien
servidos! Menos mal, que ya la gente no se deja engañar, y cada vez van menos
gente a esos concursos y juegos, para atraer y enganchar, pues como que no, ya
la gente pasa de eso, porque todo es una mentira. No hay, ni tenemos cabaña,
sino algo que da pena, una auténtica miseria. Y ello, aunque le metan música por
un tubo, que no, la gente ya pasa de esas movidas. Por supuesto, no falta foto
del que nunca ha cogido un arado –y ya eso no se usa con los tractores, y te
hacen un surco, pero cambado-; para hacer sufrir a los pobres animalitos de
Dios, a las hermanas vacas las hacen arrastrar pesados sacos de arena, sin más,
sin ton ni son y que uno con 71 años, y del campo, jamás hubiera visto eso,
porque como que no es nuestro, y no tiene sentido alguno, y aquí jamás el hombre
del campo hizo eso con vacas y toros, sino arar; lo de la trilla, pero, ¿donde
los trigales de otros tiempos y las eras donde se aventaba, y demás? Nada,
cuatro chorradas más, y no, no engancha la cosa, y no ya por el calor, sino
porque no, es una gansada, hablando de animales. Que los fomenten de una vez,
los dejen soltar y tener en el terreno, sueltos en los pastos, que no persigan
ni multen a todo al que vean con un animal por los campos, y se dejen de tanta
parafernalia. Pasa, que los pobres mendigos que aún tienen un animal, van a por
el premio, las migajas que les dan en euros, que menos es nada. Y toda vez, la
leche que tomamos viene de fuera, ¿a qué esas tres cabras, si hasta el cabildo
las mata a tiros? Pues si ya que las mata, vendiera esa carne de cabra, como que
sí, pero tampoco; y se trata y son, las cabras mejores del planeta tierra.
El Padre Báez, Pbro.
28-08-18
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