Empieza...

Empieza el hambre en el tabaibal:

Todo se seca, y nada producimos.

No hace falta ser adivino, para verlas venir: pronto aquí habrá hambre, mucha hambre. Y lo raro es, que los políticos, no hacen nada para evitarla.

Los pinos, no dan comida; y los cardones, tampoco. Y de ellos, está todo plantado. Algunos –casi todos- dicen: “¡no hay agua!” las tuneras no la necesitan; los almendros, se conforman con muy poca, y casi ninguna los olivos.

Hay árboles y hortalizas, que no exigen mucho agua; la mucho agua, las secan, y sin embargo, nada de eso se planta. Y todo se desertiza. Es urgente actuar, y lo que veo es pasividad e indiferencia. Estamos sin proyectos, sin mirada al y de futuro.

Nacido y criado en el campo, es lo que mejor conozco, y nunca me he desvinculado de él; él, es la vida.

Tuve la suerte de estar desde que tengo uso de razón, en contacto con la naturaleza, y he visto cómo ella, da la comida abundantemente. Y mirando a la que se nos echa encima, hay que salir al paso;  hay que pensar en la comida de tantos, y no producimos nada.

Es hora de comenzar a cultivar, y ello según tierras, y alturas, zonas y lugares (sabido es, que no todo en todas partes se da por igual). El caso es, que sin comida, morimos. Hay que comer, para vivir. Sin una comida normal, empezamos por perder fuerzas o energías, y ya ni para trabajar.

¿Qué provisión, en caso de una hipotética interrupción de importación de productos, tenemos?, ¿para cuánto tiempo?, ¿a dónde recurriríamos?, ¿qué fuente de recursos tenemos?, ¿comeremos pinocha? Etc.

Y si para nosotros no, ¿qué cabe pensar en el mundo que le dejamos a los que vienen detrás de nosotros? Si nos pusiéramos a soñar, y es previsible: ¿qué mundo será el de dentro de 10, 20, 30... años entre nosotros?, ¿vanos a seguir importando todo, para comer, teniendo la tierra y clima –según los científicos, el mejor del mudo- que tenemos?

Pero, la mayor: ¿A quién interesa este estado de cosas?; ¿quién o quiénes frenan el desarrollo de nuestra potencial agrícola y ganadero?, ¿por qué cierran las puerta a ambas o sector primario?

El Padre Báez.