No sabemos cuándo nació; si atendemos al Evangelio de Lucas, los pastores pasaban la noche al raso. Y esto, solo se puede hacer en verano, y cuando mucho a finales de la primavera. Pero, toda vez que los paganos celebraban el crecimiento de los días, y la mengua de las noches, celebrando el día del sol el 25 de diciembre, la Iglesia, que no celebra fiestas paganas, las cristianiza, y en lugar del sol, pone a Jesús, que es el Sol, o la Luz que nos alumbra, pues no en vano, se trata del mismo Dios, que se encarna (o se hace hombre). Y toda vez, que nació, y no sabemos cuándo, se ha puesto ese día, y se celebra su Natividad, Nacimiento o Navidad que es lo mismo.
En realidad, celebramos, que lo anunciado por los Profetas y Libros Sagrados, lo revelado por Dios mismo, se ha cumplido: que el eterno, el invisible, Aquél a quien nadie ha visto jamás, se hace carne, se hace hombre, y viene a salvarnos. Y lo celebramos. Su nombre (Jesús) -en hebreo- significa: "salvador".
A mis feligreses, les explicaba, en las distintas Misas de esta Solemnidad, que es como si a un náufrago, se le tira un salvavidas, y lo rechaza; pues prefiere naufragar, hundirse, ahogarse; pasa igual con Jesús: es el salvavidas que nos "echa" Dios; el que se agarra a Él, está salvado; pero, el que lo rechaza, ya está perdido.
Y, henos aquí, ante el misterio del Niño Dios, el mismo, que en las manos del sacerdote, en cada Misa, se hace cuerpo, carne y sangre, y que es recibido por millones, y por millones rechazado o no aceptado; y últimamente, negado, perseguido, expulsado, criticado, burlado, etc., por: la clase política, la enseñanza y los tertulianos o prensa vendida al poder aconfesional, laicista y ateo.
¡Bueno, de hecho, el comercio y la clase política, nos han robado la Navidad! Se la han apropiado, y si hasta el 24 de diciembre, y hasta las 15,00 horas dura el Adviento y llega la Navidad, ellos la "celebran y felicitan" desde finales de noviembre -con sus belenes-, todo el mes de diciembre, para la venta de regalos y afines, y unos buscando dinero a costa del "nacimiento" de Jesús, y los otros buscando votos (a costa de Jesús, al que no aceptan, ni creen en Él). Que ya hicieran (profanar y utilizar lo religioso y más sagrado, para sus fines) lo mismo con Mahoma o Alá, y no habría en pie un solo establecimiento o edificio comercial o/y político, porque las bombas mahometanas, los habrían volado, a unos y a otros.
Y tanto es asi, que me comentan que el segundo del Gobierno -un tal Rubalcaba- ha dicho (algo parecido a) que hay que reconocer que la labor social de la Iglesia es muy importante. Se trata de un halago o piropo envenenado, toda vez que se acercan las votaciones, ya andan detrás de los católicos, y con tal de conseguir que algunos piquen y voten socialismo, andan con esas pasadas de mano; pero ya vendrán con el látigo, como nuevos Herodes (¿dónde está el Niño, para ir también nosotros a [matarlo] adorarlo?).
¡No te digo!
Si asistió a la celebración de la Misa de la Natividad (y celebró por tanto su Nacimiento): ¡Feliz Navidad! Aunque, como es Fiesta que tiene octava, todavía está a tiempo. Pues, una navidad, sin Jesús que se hace carne -en cada Misa- no es Navidad (algunos no celebran los ocho días después, preceptivos, sino un mes y medio antes con intereses comerciales o/y políticos, ¡qué pena, Dios!).
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