Mes de mayo (día 29), mes de María…
Mes de la flores, mes de la flor más hermosa…
María, con S. S. Francisco…
María en La alegría del Evangelio (Evangelii
Gaudium)…
… 197 […]… Todo el camino de
nuestra redención está signado por los pobres. Esta salvación vino a nosotros a
través del “sí” de una humilde muchacha de un pequeño pueblo perdido en la
periferia de un gran imperio. El Salvador nació en un pesebre, entre animales,
como lo hacían los hijos de los más pobres; fue presentado en el Templo junto
con dos pichones, la ofrenda de quienes no podían permitirse pagar un cordero
(cf Lc 2,24; lev 5,7).
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Tabaibilidad…
… que una institución, se dedique a proteger a las tabaibas y no a los
tabaiberos, desacredita a la institución. No hace falta ser abogado o teólogo,
para ver, que las tabaibas, no generan justicia, y tampoco paz. Que hayan
tantos trabajando en proteger la tabaiba es algo que clama al cielo (Teología);
se fomenta el tabaiberismo, sin abogados que lo paren, por las migajas que les
llegan. Abogados que no defienden a las víctimas de la tabaibilidad, que son
los campesinos (cada vez menos), frente a unas fuerzas enormes de seguridad en
defensa y vigilancia a favor de las tabaibas y en contra de los tabaiberos. Y
no se devuelve la tierra a sus legítimos dueños, para que las cultiven, sino
que se las compran o inutiliza el cabildo. Y que lo que pasa con la protección
de las tabaibas, por petición de los tabaiberos gobernantes, viene de lejos,
tan lejos que, ¡no tienen ni idea de lo que es ese proteccionismo tabaiberil!
La cosa viene de Europa unida. Los campos, entregados a la tabaibilización de
las islas. Tenemos que huir de las tabaibas, sin poder defendernos de ellas. Se
acabó todo proyecto de vida, que tenían los hombres del campo. Nos tenemos que
refugiar del campo (el campo ya dejó de ser refugio contra el hambre y el
trabajo). El campo, para tabaibilizarlo, sin más. Al hombre del campo, ya sin
tierra donde cultivar o plantar frutales, solo le queda mirar al cielo. No se
forman a nuevos agricultores poniéndolos en contacto con los sabios del campo,
sino engañándolos en la granja minúscula y ridícula del cabildo en bañaderos.
Imposible el desarrollo del campo, sin ganadería posible alguna, por la falta
de voluntad de los gobernantes todos (europa, espania, gobierno autonómico, cabildo, consejeros, ajuntas y
mientos, concejales, etc.). Han llevado la agricultura a los patios de recreo
de los colegios de niños explotando a menores en trabajos que prohíben a los
mayores y ancianos en el campo, y a entre coches en las urbes (engañando a unos
y otros, y enfermando a todos). Mientras, la espiral de la pobreza se expande,
al mismo paso de la multiplicación de las tabaibas.
El Padre Báez
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