compatibles

Flora y fauna son compatibles...

... en el Macizo del Noroeste de la isla o por donde se conoce popularmente por todo Gu-Guy (sabido es que está Gu-Guy Grande, con un barranco y playa chicos, y está Gu-Guy Chico, con barranco y playa grandes. Y es el caso que si van a plantar lechugas, que antes que se las coman las cabras, se las come el sol, si en lugar de coles y papas, plantan olivos, no hay cabra en el mundo que ni rama, ni fruto por amargos los pruebe.

Nada fácil es plantar algo, donde la piedra lavada por los siglos y la erosión llevándose la tierra, ha dejado en desierto pétreo todo el macizo, de donde le viene precisamente el nombre, registrado en los mapas, que plantar algo allí, como no sea olivos, no hay nada que prenda o pegue, y ello si lo hacen ya justo en este tiempo y ya escaso, porque es cuando por simplemente enterrar un gajo de olivo, en alguna de las quebradas, rajas o en entrepiedras, que con las lluvias tardías y estando en el invierno, es lo único que puede salir adelante, y ello sin ayuda de Europa ni de nadie, sino de la propia naturaleza, pues sabido es cómo en la dura en extremo (Extremadura), y en la parte seca de Andalucía, brillan verde oscuro los olivares vencedores de sol y solajeros, pues ándese por igual por aquí, y sin matar las cabras, que sigan donde siempre, y si lo quieren verde, ahí tienen una solución. ¡Ah, y si necesitan olivos tengo varios miles que ofrecerles, gratuitamente! Eso sí, tendrán que llevarlos en helicópteros para lo que sí necesitarán la ayuda de Europa, que después, en la cosecha de la aceituna, no sé si las cogerán, porque a riesgo de la propia vida, por aquellos andurriales, como no sean avezados pateadores -no senderistas, que van por lo llano- no escapa ni uno, y menos si bajan cargados, con lo que mejor es dejarlo como está, o plantarlo de olivos y tenerlo verde, si es el capricho de verlo así, que verde son también los cardones, las tabaibas, los beroles, los tajinastes, las jaras, tuneras indias, etc., que precisamente no son endémicas, ¡ni mucho menos!

El Padre Báez, dando una solución más, a las ya muchas dadas y otras tantas por dar con tal de salvar las cabras que estos asesinos de cabras del cabildo, quiere acabar con ellas a pesar de tener a todo el mundo contra tal criminal decisión.

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“... caerán los opresores... revoquen sus decretos...” (del himno de vísperas de hoy).