Loq ue nos ha quitado...

Lo que nos ha quitado el turismo, y nadie dice:

-        Nos ha quitado la costa, llenándola de cemento, para ellos.

-        Nos han robado las playas, llenándolas de hamacas, de grasas, aceites, etc.

-        Nos han quitado terrenos para plantar tomates (hoy de bungaloes, apartamentos, casas, etc.)

-        Nos han robado los rebaños de cabras y ovejas que pastaban por donde ellos ahora se tumban al sol

-        Nos han quitado la orografía, destrozándola, para ellos: los riscos y laderas, donde en otro tiempo, las cabras, los lagartos, la flora autóctona, etc.

-        Nos ha quitado el trabajo en el sector primario, sustituyéndolo por el atendimiento –o servicio- a ellos (los turistas).

-        Nos han quitado nuestros: principios, valores, costumbres.

-        Nos han quitado la fe, con nuevas y extrañas sectas, cuando no de ateísmo e indiferencia religiosa.

-        Nos han robado la moral, cambiándola por la del solo placer y divertimento.

-        Nos han robado el precio justo de las cosas, elevándolas a inalcanzables.

-        Nos han robado nuestra cultura, llenando en sus paseos la isla, de pequeñas pirámides en recuerdo de sus muertos.

-        Nos han propiciado que algunos –o muchos- vivan del sexo, del pillaje, del tirón, de la delincuencia...

-        Nos han embrujado, haciéndonos creer la economía depende de ellos, trampa en la que han caído al 100 %, todos los políticos.

-        Nos han quitado la libertad, y han convertido a este pueblo en limpias-retretes y hacedores de camas, cuales siervos sumisos.

-        Nos sustituyen por sus propios coetáneos, y nos hacen ver nos crean puestos de trabajo.

-        Nos han idiotizado de tal manera, que celebramos –para ellos- un Carnaval de cuatro meses.

-        Hacen de nuestra tierra panacea de conductas que repugnan a la fe y a la moral (matrimonios entre iguales, alcohol, droga, crímenes, ahogados...).

-        Fomentan un turismo, que se carga la moral, ética y buenas costumbres.

-        Nos han robado el futuro, destrozando una isla, antes fecunda y en paz.

-        Nos han llenado la isla de desperdicios, de excrementos, de basura, de...

-        Solo gastan y consumen, sin que revierta nada en nuestro bien.

-        Etc.

Son, algunas ideas a voz de pronto, y dichas en pocas palabras. Cada idea exigiría un comentario aparte.

Da pena que sesudos universitarios, cultos periodistas, analfabetos políticos, y la masa borreguil que no piensa, nadie vea la hecatombe y ruina, que supone el turismo, y cómo su desaparición total, nos haría volver a los años 50 y anteriores del siglo pasado, cuando y donde se vivía como Dios manda, con una economía boyante, con trabajo, y sin saber qué es eso del paro.

Contrariamente a lo que antecede a estos dos últimos párrafos, tenemos que el turismo, ningún bien ha aportado o ha traído a esta ya más que desgraciada tierra, donde ciegos, nos plantan pinos por castañeros, cardones por tuneras, y acebuches por olivos (por poner tres ejemplos).

Pudiera seguir, pero no quiero cansar, ni agotar mis argumentos; al menos, para que usted –mi querido lector- también aporte sus propias ideas, en esta línea, a no ser que sea de los que creen, que la salvación (en todos los niveles), nos vienen del turismo. Considere la lista primera, y vea si estoy errado o equivocado en mi apreciación.

El Padre Báez.